in doses at night

006

el hombre es demasiado bueno para él, entiende yuta, así que agradece tener un trozo de él, aunque sea a distancia, durante sólo una hora o, si tiene mucha suerte, una noche. tener a donghyuck usándolo como asiento, diciéndole lo que tiene que hacer, explotándolo para su propia satisfacción, sabe que es afortunado. aunque realmente le gustaría que donghyuck se bajara de su regazo para ahorrarse el problema de sus pantalones y el paseo de la vergüenza que supone cubrir su entrepierna sucia.

por suerte, mientras se complace a sí mismo y tortura a yuta, donghyuck inclina la cabeza hacia atrás y deja la boca abierta, instando a yuta a inclinarse hacia delante con un silencioso y desesperado ―bésame.

yuta no necesita que se lo digan o se lo pidan dos veces, así que se inclina para presionar sus labios húmedos contra los pegajosos del bailarín, lamiendo en un momento después de que sus bocas se toquen. está tan caliente y tan dulce y tan lleno de todo lo que ha extrañado, pero siente que sus manos se están entumeciendo por la falta de estimulación y su peso apremiante, y sólo quiere tocar, tocar, tocar.

un rastro de saliva los une mientras un sonriente y jadeante donghyuck se aleja lentamente, dejando al hombre de la silla siguiéndolo como un cachorro perdido. cuando se retira por completo de yuta, se asegura de tirarle del cabello rizado en un movimiento descendente, justo hacia su trasero que se balancea, pero no lo suficientemente cerca como para que yuta entierre su cara entre la hendidura.

yuta está a punto de suplicar un poco más, de darse por vencido, de decir su palabra de seguridad porque lleva tanto tiempo aguantando que su polla va a estallar al menor roce, pero entonces donghyuck se da la vuelta, con los ojos entrecerrados mirando a yuta a través de las luces de neón.

en cuanto se da la vuelta, yuta sabe que no está tramando nada bueno. con donghyuck, siempre tiene razón.

donghyuck pone una mano en cada una de las rodillas de yuta, inclinando la cabeza hacia un lado mientras dice, ―gracias por dejarme hacer eso.

yuta no está en condiciones de que le den las gracias, pero jadea un agradecido ―de nada, cariño ―cuando las yemas de los dedos se clavan en la parte blanda del interior de sus rodillas y lo obligan a separar las piernas.

aspirando otra vez con fuerza, observa cómo donghyuck le desabrocha y baja la cremallera de sus pantalones sin decir nada. sólo entonces retira las manos del peso de su trasero para ayudar a bajar sus pantalones, suspirando cuando su polla queda finalmente libre. antes de que la ropa llegue a sus tobillos, sus manos se dirigen inmediatamente al cabello del bailarín, sólo para tocarlo.

―fuiste tan bueno para mí ―dice donghyuck, mirando a yuta más allá de las pestañas que se agitan y de los labios que se abren. el cumplido arde en el pecho de yuta incluso después de que la pecaminosa boca de donghyuck baje alrededor de su polla.

los dedos de sus pies se enroscan en sus zapatos, y su agarre se estrecha en los mechones plumosos de donghyuck, su cuerpo se retuerce para evitar terminar antes de tiempo, pero dios, es tan difícil. quiere ver cómo la experta boca de donghyuck se lo lleva hasta que sus labios se estiran y su garganta se contrae, ver cómo esas pestañas cubiertas de rímel se agitan con el canto de sus ojos al recibir una enorme polla.

sin embargo, también quiere inclinar la cabeza hacia atrás, follar en ese cálido y húmedo agujero y correrse tan fuerte en la garganta de donghyuck hasta que se convierta en un desastre que se ahoga y balbucea, agradeciéndole por la carga.

afortunadamente, donghyuck se lo pone fácil para que no tenga que pensar por sí mismo, bajando tanto que su nariz se entierra en la espesa mata de vello y la saliva le cae por la comisura de los labios. yuta no puede evitar mirar y rascar el cuero cabelludo del bailarín mientras éste agita sus caderas en pequeños movimientos, donghyuck bajando mientras él sube; un ritmo perfecto.

son caricias cortas y rápidas, agarrando el suave cabello castaño y empujando hacia arriba hasta que su propio abdomen se aprieta con la tensión alrededor de su polla. la sensación aumenta rápidamente, más rápido de lo que a yuta le gustaría admitir, pero está ahí y sus dedos se tensan en el cabello de donghyuck y su mandíbula se aprieta, la respiración se vuelve anormalmente rápida.

antes de que pueda advertir a donghyuck del desastre que se avecina, el bailarín se aparta. ―demasiado predecible ―dice donghyuck con voz rasposa, arrastrando un pulgar y recogiendo la humedad que se ha acumulado.

un gruñido ahogado constriñe la garganta de yuta y un patético gemido sale de sus labios. donghyuck aprovecha la boca lastimosamente abierta del hombre para deslizar el dedo en el calor, yuta lo envuelve con los labios y chupa lo que puede.

el pulgar se engancha bajo sus dientes, abriendo su boca, el agarre en su barbilla inclinando su cabeza mientras donghyuck se levanta. mirando al bailarín, los ojos de yuta se abren de par en par, completamente fascinado cuando se acerca, con las piernas pegadas a las de yuta.

―¿lo quieres, papi? ―pregunta donghyuck, hundiendo un poco más el pulgar. dejando que yuta asienta, mueve la cabeza con el movimiento burlón y agarra la mano del otro para apoyarla en su cintura. ―bueno, continúa.

parpadeando lánguidamente, el corazón de yuta late en su pecho mientras su mano recorre la caída de la cadera de donghyuck y el bulto de su trasero hasta que las yemas de sus dedos se calientan en el pliegue. sus ojos recorren el rostro del bailarín mientras roza el hilo delgado y lo enrolla en su dedo índice, observando los párpados entrecerrados y brillantes de donghyuck y su intensa mirada.

su expresión se contorsiona, con el labio inferior atrapado bajo unos dientes afilados y brillantes y las cejas fruncidas, cuando yuta agarra bien el tapón y lo saca. ―date prisa ―susurra con dureza, sacando el pulgar de la boca de yuta y untando su mejilla con saliva mientras agarra el cabello rizado de la base del cuello de yuta.

por qué susurra, yuta no lo sabe, sólo sabe que le gusta el sonido de la voz alta y ronca de donghyuck diciéndole lo que tiene que hacer, simplemente porque no le gusta la sensación de vacío. pero ha sido una noche larga y de prueba y yuta extraña el calor tanto como donghyuck extraña estar lleno, así que levanta un poco a donghyuck, lo suficiente para agarrar su propia polla y alinearla con el calor húmedo, y hunde al bailarín en un solo movimiento.

―joder, sí ―gruñe donghyuck, respirando con dificultad por la nariz y agarrando el cabello de yuta con tanta fuerza que le duele. en lugar de esperar a acostumbrarse al estiramiento, planta una mano en el hombro del hombre y se levanta, bajando con fuerza y arrancando ruidos de ambos.