#04 La direccion del viento no favorece a la iglesia

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Capítulo 04

En las profundidades del bosque podemos ver a una niña caminando tranquilamente, esta tiene un largo cabello anaranjado liso y lacio, tiene echas dos coletas, sus ojos son filosos de color marrón, viste un vestido haraposo de color rojo con un par de botas negras, esta caminaba sonriente por el bosque hasta que se tropezó y callo al suelo cayendo sobre sus rodillas raspándoselas sangrando un poco.

-¡Duele!...- exclamo ella levantándose, pero de pronto se quedó perpleja al ver lo que tenía en frente.

-¿Aceptarás algo de mí?-le pregunto un ser que se encontraba frente a ella.

Parecía que no tenía físico, era como una figura fantasmal de sombras teniendo la silueta de dos brazos y se podía notar dos enormes ojos de color rojo.

-No, por favor, tú de nuevo no- decía la niña intentando correr, pero el ser oscuro la tomo por el cuello impidiéndole irse, sufriendo mucho ella, pero de pronto un libro choco contra la cabeza de ese ser soltando a la niña.

-A pesar de tu apariencia, eres sólido, esto solo será más fácil- le dijo Beel quien había lanzado el libro y estaba exhalando de manera entrecortada, -Pequeña señorita, fue difícil encontrarte, ahora aparta- le dijo el castaño a la niña observando el moretón que se le había hecho en el cuello a ella cambiando su semblante a uno serio.

-¡¡¡A ti no te quiero dar nada!!!- le grito el ser fantasmal convirtiendo la forma de su mano en una hacha.

-Que susceptibles son hoy en día- dijo Beel y de pronto un fuerte hachazo fue lanzado atajar su costado rasgando ligeramente su ropa, pero este lo esquivo.

-¡¡¡Muere!!!- grito el demonio y por cada intento de partirlo en dos Beel se mantuvo esquivando y para cuando fue a lanzar una patada empezó a soplar una gran ráfaga de aire.

-¿Que demonios es este viento?- se pregunto Beel caminando a proteger a la niña agarrándola de la mano, ya que salió volando mientras veía como el ser oscuro se retorcía de dolor.

-¡¡¡Ahhhhh!!!- gritaba este hasta que se esfumó en el aire.

-Vaya, un contratiempo, no sabía que fuera tan débil ante el aire- dijo un rubio que estaba caminando hasta allí.

-¿Quién eres?- pregunto Beel el cual estaba cargando a la niña de modo nupcial.

-Eso no te incumbe, apestas a demonio, ¿quién eres tú?- preguntó el rubio.

-De que hablas idiota, no me estés cambiando el tema, ¿cómo sabías que el demonio era débil al viento?- le pregunto nuevamente el castaño.

-Si tanto insistes, mi nombre es Kenta un caza demonios y no sabía que era débil al viento, solo lo use por ser mi estilo de pelea, debilucho- le respondió el rubio.

-¿Débil?- pregunto Beel dejando a la chica en el suelo caminado varios pasos hasta quedar frente a Kenta y de pronto los ojos del castaño empezaron a dar vueltas como un remolino, -Duérmete- le dijo este, pero no tuvo efecto en el rubio lanzándole este inesperadamente un puñetazo en el rostro mandando a volar a Beel contra varios árboles quedando este en el suelo recubierto de sangre.

-Que es esa estupidez, no sé que era, pero no me afecta, pelea como hombre- le reto Kenta caminado un poco agarrando un árbol ejerciéndole fuerza hasta que lo arranco y con este se movió hasta donde estaba el castaño que se estaba levantando.

-Eres fuerte, por eso no funciono, será a la vieja escuela- decía Beel limpiándose la sangre cuando de pronto Kenta uso el árbol para intentar golpearlo con una gran arremetida, pero el castaño lo intercepto con una patada partiendo en dos la madera dejando desarmado al rubio.

PurgatorioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora