Nunca lo sabrán.

Bienvenida Alexis.

Volví a California. Y cada noche, cuando volvía conduciendo a casa, las palmeras me recordaban su cabello castaño y alborotado. Nunca me dormía sin haberle dado like a alguna de sus fotos en instagram. Sabia que los likes, instagram y ser popular eran su vida y lo hacia muy feliz, sacando el surf.

Despues de todo nunca nos hablamos, nunca arreglamos para vernos ni nada. Pero un dia se me ocurrio una idea. Dos meses después, le escribí por whatsapp: "Hola Jay. Espero que te acuerdes de mí. Aunque entendería que no lo hicieses. Te escribo porque llevo días dándole vueltas a una idea. Creo que podría convertirte en una estrella. Solo necesitamos Instagram. Créeme. Llevo varios años trabajando en esto, se como funciona. Ven a visitarme a California y tendré un plan desarrollado. Lo veo muy claro. Esto podría cambiar tu vida. Espero tu respuesta".

A los dos días Jay me contesto y dijo que tomaría un avión hacia California.
No era una estrategia para volver a verlo. Bueno, sí. Pero no solo para eso. Creía honestamente todo lo que le había dicho. Instagram enpezaba a convertirse en una fuente de negocios. La fabrica de sueños ya no era Hollywood. Ahora todo el mundo la llevaba en el bolsillo. El efecto que podía provocar sobre la gente mediocre sería devastador. Y no hay nada mas valioso en Instagram que dar envidia así que tuve que crear un personaje.

Cuando Jay entró en mi "oficina" Alexis ya estaba ahí. Dios, cómo la odiaba. Era la hija de un ejecutivo discogrsfico con el que habia trabajado hace mucho. La típica chica de Beverly Hills obsesionada con la fama, era linda, modelo y súper creida. Pero cuando su padre me dijo que se había aficionado al surf, supe que la necesitaba. Y cuando vi el modo en que miraba a Jay, supe que había acertado.

Les conté el plan. Iban a fingir que eran pareja. Iban a viajar por el mundo de paraíso en paraíso. Harían surf, se tirarían en paracaídas y nadarian con tiburones. Y lo harían junto a dos personas que lo documentarían todo. Fotos para Instagram. Vídeos para YouTube. Montajes para Vine. Les iban a enseñar al mundo lo que era una vida perfecta, aunque es me nolestaba muchisimo, sabia lo que hacia. Durante medio año me ocuparía de todos los gastos. A partir de entonces calculaba que ya podríamos estar generando los suficientes ingresos publicitarios para que mi idea fuese auto suficiente. Cuando hubiese beneficios, iríamos al 33% por ciento.