Campamento De Verano

Capítulo#3

Hola y buenas pequeñas polillas de libros digitales bienvenidos a este Campamento, donde, descubrí es una fantasía efímera y donde los colchones guardan secretos de sus propietarios.

Capítulo#3

"Un camino para comenzar"

Sonido.....

Los sonidos se aprecian mejor en el alma que con los oídos, hay canciones que no se guardan en la memoria sino en el corazón.A veces el cuerpo reacciona a la melodía, como si de un imán se tratase.

Mis ojos aún no se encuentran abiertos pero siento un sonido constante, mis oídos se agudizan, son aves, al parecer ya ha amanecido.

Abro mis ojos y me siento en la litera esperando despertarme del todo,mis pies cuelgan, recordándome mi elección de dormir en la litera de arriba. Comienzo a bajar con cuidado de no despertar a Christian quien duerme abajo.

Recuerdo aún como me desvelé anoche, no podía dejar de pensar contínuamente en esa melodía, fue un fluido de sentimientos, mezclado con algo de talento,un toque femenino y un poco de pasión por el instrumento.

¿Quién era ella?

-------La noche anterior-------

Pov Kayla

—Hey quien era ese —le dije a mi amiga que parecía bastante impactada por los hechos —Hey reacciona —le digo ya que ella está en shock —Ya de verdad responde —ella se ríe y muerde su labio inferior.

—No tengo ni puta idea de quién era ese chico de abrigo negro—ella me responde con un tono un poco sarcástico pero a la ves el romance afloraba en su voz—arqueo una ceja y le digo con un tono burlón—te gusta ese chico que ni siquiera sabes quién es —le voy a volver a decir algo pero ella me dedica una mirada asesina así que me callo.

—Después de todo ese chaval te logro cautivar con su voz—dice Merlin mientras escribe en su movil—al parecer es bastante atractivo ,o, ¿no lo viste de frente? —Preguntó de nuevo Merlin y deja de escribir .

—Mia juega en su regazo y nos mira —no ese chico no me gusta para nada así que dejen de bromear—dijo sería y puso la guitarra en su estuche.

Luego todas vamos ha dormir pero le pregunté de nuevo    —Mia de verdad que no te gusta el chico misterioso que cantó con la canción que estabas tocando —Nooo!—ella responde rotundamente aunque por dentro se que esta pensando en él, me río en voz baja y pienso —Esto será realmente interesante.

-------En la mañana-------

Pov Nayel

Son las 5:30 y en el campamento todo el mundo está durmiendo, salgo a correr como es de costumbre en mi casa pero no se por donde puedo correr así que empiezo por el estanque y hasta las cabañas de las chicas.

Empiezo a calentar y de pronto veo al entrenador de natación que se llamaba —me rasco la cabeza mentalmente —a si Jonathan —Entrenador —lo llamo, y me sorprendo al analizar su rostro, es un viejo amigo de mamá el cual no veo desde que tenía 7.

El me pregunta mi nombre, puedo ver cierto interés en la forma en que me mira, como si supiera algo sobre mí y quisiera comprobarlo.Me presento y parece como si se le iluminará el rostro, pero no con interés sentimental, es ese brillo de cuando vez a un viejo amigo.

Entonces me sonríe y ya se lo que quiere preguntar, pero de igual manera dejo que lo haga  —Por casualidad ¿tú eres el hijo de Kass y Marco? —me mira con una sonrisa que parece sincera.

Me lo imaginaba, mi madre no me mandaría a un lugar donde ella no conozca a alguien ¡Que raro!—exclamo y el parece divertido con mi reacción.

  —Ella solo lo hace pera protegerte — es su respuesta.
 
Si, claro—respondo con cierta molestia, no soporto que mi madre me vea cómo a un bebé que no puede valerse por si solo. Estoy a punto de seguir con mis ejercicios cuando siento que alguien me toma del hombro.
 
—piensas correr solo— me pregunta Jonathan con una sonrisa que intenta parezca inocente.

—Este...—me lo pienso —¿Puedes acompañarme si quieres?

El comienza a correr— Intenta seguirme el ritmo si te atreves—y sé que es un reto, así que con una sonrisa intento alcanzarlo.

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Todos a las 7:00 en la Cafetería —Se escucha decir en el altavoz.

Christian me ve llegar a la cabaña pero su mirada parece perdida, fuera de sí mismo.

Miro el reloj en mi mano, son las 6:30 de la mañana .

—Está  despierto desde hace un rato—me comenta Gabriel cuando paso por su lado,
le dedico una mirada de agradecimiento.

—¿Estas bien, Bro?—le pregunté con angustia a Christian, mientras me siento a su lado. Su expresión decaída me indica que le pasa algo.

El sonríe,  tranquilizandome un poco, pero su sonrisa no llega a sus ojos.

—Estoy bien sólo que tengo un montón de pensamientos dándome vueltas en la cabeza— su voz es apagada— Tonterías.

Intento decir algo pero la voz de Gabriel me interrumpe.
—¿Quién va a ser el primero en ducharse?—

Yo me voltee rápido hacia él.

—Me ducho primero, tengo olor fuerte a sudor —digo oliendo la sudadera que traigo puesta.

—Pues es todo suyo su pestilencia—dice y luego suelta una carcajada que  hace despertar a Mike a lo que le este le responde lanzando una almohada que da de pleno en su cara .

Gabriel le dedica una mirada de odio y comienzan a discutir entre ellos, yo  me apresuro a las duchas, no quiero que esos dos arruinen mi buen humor.

Ya a las 7:00 estábamos desayunando.

En el parlante anuncian las actividades del día y  estaba ansioso a pesar de lo que había dicho en casa.

Estaba disfrutando de este campamento más de lo que me hubiera gustado admitir.

Realmente esperaba poder empezar con buen pie en este lugar.

Pero no todos nuestros deseos son escuchados, eso es algo que descubrí más tarde.