Capítulo 2.

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Kelly y sus amigas salen del baño, mientras yo me quedo esperando a que estén lo suficientemente alejadas como para salir a correr hasta mi próxima clase. Cuando se alejaron vi mi oportunidad de que no me pillasen, y salí a correr. Llegué a mi clase justo a tiempo, ya que el profesor de lenguaje acababa de entrar. Dimos la clase como de costumbre.

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El resto del día pasó normal. Llego corriendo a casa como de costumbre y me hago el almuerzo. Cuando termino me pongo a estudiar un poco. Tras tres horas de estudio, subo a mi cuarto, me pongo los auriculares y escucho música.

Escucho que llaman a la puerta. Miro desde el gran balcón de mi cuarto la entrada a mi casa. Es Michelle. Bajo las escaleras a toda prisa para abrirle la puerta a mi mejor amiga.

- ¡Hola, Ashley! He traído una película y palomitas, y otra cosa que creo que te va a gustar más que todo lo que hay en este mundo.

-¡Genial! Pasa, me muero de ganas de saber que es.

Michelle entra mientras yo cierro la puerta. Hay una cosa que me preocupa y me está dando vueltas a la cabeza. El sueño de esta noche parecía tan real... además, me muero de ganas de saber como termina...

Michelle pone la película y de una bolsa de plástico saca palomitas y, ¡NUTELLA!

-¡MICHELLE! ¡TE AMO!

-Ya lo sabía, soy adorable.

-Creída.- En ese momento, si las miradas mataran, estaríamos en mi entierro.

- Bueno, empecemos a ver la película.

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Terminó la película y Michelle me notó nerviosa.

-Ashley, ¿estás bien? Parece que algo te preocupa.

-Bueno, es que esta noche he tenido un sueño que...

-¡Ah! ¿Es eso? ¡Entonces no tiene importancia! Bueno, me voy, te veo mañana.

-Vale, adiós.

Cuando me doy cuenta son las 10 de la noche, y para colmo, ¡mañana solo es Martes!...

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