Único

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Siempre fue así... Dolor y más dolor, sin poder superar tu muerte, la verdad no creo que algún día pueda hacerlo. Eras todo para mí, mis ojos, mis oídos, la luz que iluminaba mi día y mi noche. Sin ti todo se fue, yo y los chicos tratamos de estar sin ti pero no supimos como... Bueno al menos lo intentamos.

Tu siempre fuiste una luz, tu sonrisa iluminaba todo lo que existía y lamento mucho no haberme dado cuenta de lo que realmente significaba y lo que tú sentías, lamento no haberte respondido esa llamada y esa última puta llamada.

Te fuiste hace 5 años, todo se fue a la mierda, me despidieron de cada trabajo que tenía porque no sabía controlar mis impulsos de irá, los impulsos que solo tú podías controlar, nunca me di cuenta cuan necesitado estaba de ti. Eras mi único soporté, mi única luz.

Aún recuerdo cuando te conocí. Dios, estabas tan brillante ese día. Fue en una fiesta que había organizado la fraternidad por los nuevos, tu eras uno de ellos, al llegar fuiste el centro de mi universo. Nunca creí que existía el amor a primera vista pero te vi, allí sentado con tu amigo. Me acerque a ti, nos saludamos y comenzamos a hablar. Teníamos tantas cosas en común, duramos hablando hasta que amaneció, fue hermoso. Te pedí tu número y tú me pediste el mío, después de esa vez comenzamos a hablar todos los días, literalmente era como si tú me hubieses hecho algún hechizo y realmente no me importaría si lo hubieses hecho... Yo aún así estaría fascinado por ti.

Las salidas y demás comenzaron, tu en cada una de ellas te veías tan jodidamente precioso, tu belleza opacaba cualquier otra cosa en el mundo, para mí eras el ser más bello del mundo... Aunque por dentro eras como una estrella, distante para abrir tus sentimientos, muriendo lentamente.

Perdón por no haberme dado cuenta de lo que pasó, perdón por todo lo que te dije esa noche, perdón porque no te pude alcanzar.

Tu eras el mejor de la generación, todos lo sabíamos, muchos te envidiaban, pero yo te amaba... Y aún lo sigo haciendo... Tu inteligencia era superior a cualquier otra y la forma en que le iluminabas el día a todos era fascinante.

Siempre usando los típicos pantalones y camisa azul que parecía estar deslavada... Al principio creí que siempre usabas lo mismo todos los días, pero cuando entre a tu cuarto y abrí tu clóset me encontré con lo increíble... Tenías cientos de pares de los mismos.

Tu decías que no querías más, que con eso estabas bien, que ese era tu estilo. Pero yo quise que tuvieras algo mío y te regalé una chaqueta que yo mismo pinté, duré un tiempo haciéndola pero al final al ver tu hermosa sonrisa y la emoción en tus ojos el día de tu cumpleaños, me di cuenta que todo valió la pena.

La verdad no importaba lo que tuviera que hacer, siempre quería verte con una sonrisa. Fue egoísta querer eso.

Cuando mis padres se divorciaron y los dos dijeron que había sido mi culpa eso me destruí por completo, pero tú siempre estuviste allí, apoyándome y abrazándome, aún puedo sentir tu calor.

A veces cuando te extraño uso una de tus camisas y le pongo de tu perfume, la abrazo llorando hasta quedarme dormido y puedo sentirlo, puedo sentir tu calor abrazarme y por fin puedo sonreír.

Se que los chicos están preocupados por mi y realmente se los agradezco, ellos son mi familia. Tu amigo y el mío si se terminaron casando, y que crees? A mí me cayó el ramo. Gracioso porque siempre me decías que cuando te invitaran a una boda querías recibir el ramo.

Tal vez en el cielo puedas casarte con la persona que ames.

No... No quiero que te cases con nadie, tal vez sea egoísta pero yo quiero casarme contigo, esperarte en el altar y verte llegar con un traje blanco y con un ramo de rosas blancas, tus favoritas. Verte llegar a casa y que solo me mires a mi, tomarte de la mano no solo como mi novio, tomarte de la mano como mi esposo, por favor espérame en el lugar que estés y ten listos los preparativos para la boda porque en cuanto llegue nos casaremos.

Te amo, no sabes cuánto. Ame casa parte de ti, tus pequeños hoyuelos, tu sonrisa que alguna gente envidiosa diría que es fea pero en realidad fue lo más bello en mi vida, tus manos, dios tus manos como me enloquecían, tus labios tan suaves como el algodón, por fin pude saber cómo se sentía en algodón sin morir por la alergia. Tu piel tan suave, tan bella y tan adictiva, la piel que me encantaba marcar cada vez que podía, tu cabello que siempre lo teñias con colores distintos y que nunca me cansaba de verte feliz por ello.

Nuestra primera vez, fue magnífica. Espero que no solo para mí. Me dijiste que estabas listo y aunque te note nervioso y te pregunté tantas veces que si estabas seguro tu en todas dijiste que sí, incluso te cansé de preguntar que tú mismo diste el primer paso, me besaste... Me besaste con unas ganas, fue el inicio de una ráfaga de besos y toques que se me quedaron marcados de por vida. Aún recuerdo la forma en que lo hiciste, pero recuerdo más los dulces y hermosos sonidos que salían de tu boca, lo disfrutabas y yo lo hacía. Mis manos recorriendo tu cuerpo y las tuyas recorriendo el mío, era como el toque de una flama, era tan adictivo. Lo hicimos solo una vez esa noche, aunque yo quería y tú querías que fueran más, pero no quería que te lastimarás porque si en esa vez me pude aguantar de hacerte todo lo que quería, entonces me detuve y esperé. Tú al siguiente día me pediste que lo volvamos a hacer y que esta vez no me detuviera y que dejara salir lo que sentía. Fue magnífico hacerte gritar mi nombre. Aquél toque que me quemaba y me encantaba, siempre lo recordaré.

Tantas veces quisieron separarnos pero no pudieron.

La vez que estábamos hablando de la película que queríamos ir a ver al cine y aquella chica llegó y me besó. Tu te enojaste tanto, nunca te había visto así, irónicamente aquella noche se incendio su casa. Eras peligroso, me encantaba que lo fueras.

Tu eras dos cosas... Un dulce sol brillante y una ardiente lava dispuesto a acabar con todo lo que se te ponga enfrente.

Me enamoré de ti por eso, tratando de ocultar lo que eras, tratando de que nadie se diera cuenta, pero yo lo hice. ¿Me dejaste hacerlo? ¿Me dejaste ver realmente lo que el amor de mi vida era?. La verdad no importa ahora, lo pude notar y fue magnífico, ver aquél brillo en tus ojos mientras lo hacías, ver la emoción, eso me hacía querer que pasará más seguido, no se podía si queríamos que no nos atraparán.

Cuando nos fuimos de vacaciones, el avión te aterraba, te aferraste a mí como un gato y me encajaste las uñas, no me dolió claramente. Verte tan tímido y asustadizo me dio algo en el corazón y me enamoré aún más de ti, si tan solo se pudiera.

Las vacaciones fueron tranquilas, divertidas y sobre todo con muchas aventuras, tantas que aún tengo marcas de esa vez. Fue divertido, siempre fue divertido estar junto a ti, también fue feliz y muy amoroso.

Cada vez que me decías que me amabas algo en mi revoloteaba, si tan solo pudiera escuchar una vez más tu dulce voz, diciéndolo y gritandolo.

Cómo aquella vez que te declaraste, yo ya me había declarado pero me rechazaste por miedo. Viste que realmente no había nada malo. Conmigo nunca estará nada malo, yo siempre te protegería.

Aquél día fue el peor que había vivido. Había despertado y no te encontré a mi lado, creí que habías vuelto a tu casa así que te llamé, te deje miles de mensajes pero no respondías. Les pregunté a nuestros amigos pero tampoco me dijeron nada.
No te encontré por ningún lado, ni en tu casa ni en ningún otro lugar. Hasta que llame a tus abuelos y me contaron lo que pasó. Me sentí horrible y corrí hasta llegar a casa de tus abuelos, ni siquiera sentí el tiempo que dure corriendo ni lo que pasó después.

Todo fue tan rápido y al final del día ya estabas en esa caja. Siempre fuiste hermoso, aunque estuvieras pálido y frío en esa caja, tu belleza incluso fría era la que más destacaba, siempre empañando cualquier otra cosa y mi vista siempre estuvo para ti.
Perfección era en lo único que podía pensar.

Todo eso paso y ahora yo hasta arriba de un edificio mirando hacia abajo, pensando en lo lindo que sería tocarte, besarte o tan siquiera verte por una vez más.

El sonido de mi teléfono, llamada tras llamada de todos nuestros amigos.
Fue el primero que lancé al vacío.

—Ángeles cómo tú solo se verán a la hora de la muerte...

Y así fue como salté... Nada me importó, nada... Solo cerré los ojos y me deje llevar. Al sentir tu calor sonreí y todo lo demás se convirtió en un lugar oscuro y lo único que iluminaba era tu belleza y color. Allí estabas, tan radiante y hermoso.

Oh... Mi lindo Build, siempre fuiste el más bello de todos...

Angel Like You (BibleBuild)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora