Boy Scout! #yoonseok

Boy Scout!

¡ADVERTENCIA!

Este One shot contiene: daddy kink, dirty talk, metida de dedos y lengua en el bonito trasero de Hobi <3, un poquito de after care y sobre todo... COITOOOOOOOO

Si no te gusta, salte, no interrumpas a las personas que sí quieren leer. Muack

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Yoongi fue el primero en actuar, atacando los dulces labios de Hoseok y abriéndose paso en su cavidad bucal con su lengua, tomando el control de la situación al instante.

El tiempo pasaba y las prendas iban desapareciendo, ambos quedando solo en ropa interior al llegar a la cama del mayor.
Las caricias, los gemidos y gruñidos eran lo que ahora afloraban; el contacto, la posesión del contrario, ese era su objetivo esa noche, y por supuesto que lo iban a conseguir.

— Yoonie... –susurró Jung al separarse por la falta de aire– Tómame rápido, por favor.

— Zorrita impaciente. –sonrió Min tomando entre sus dedos el pezón derecho del moreno y comenzando a jugar con este– ¿Tan desesperado estás por mi polla?

Hoseok no pudo contestar, Yoongi lo había acorralado y dado en su punto débil. Pequeñas lágrimas comenzaban a caer por sus mejillas, el placer comenzando a nublar su mente, volviéndolo un muñequito maleable, dispuesto a ser utilizado.

El mayor lo recostó en la cama y se posicionó sobre él para después empezar a besarlo profundamente y seguir maltratando sus sensibles botones marrones– Abre esas bonitas piernas para mí, príncipe. –Hoseok obedeció al instante, derritiéndose ante el contacto de la firme mano de Min sobre el interior de su muslo izquierdo– Tan suave... tan marcable, mierda.

Yoongi no pudo resistir más, trazó un camino de besos húmedos y mordidas hasta llegar al borde del bóxer completamente húmedo del más alto. Una sonrisa traviesa se asomó por los belfos del pálido antes de ubicar el lugar donde se encontraba el glande de Jung y comenzar a succionarlo por sobre la tela.

– ¡YOONGI! –chilló el menor, retorciéndose por el repentino placer y atención en su zona baja, enredando sus dedos en la cabellera menta del contrario– N-No pares... por favor, no pares... ¡Ow!~ –otra oleada de extasis se expandió por su cuerpo cuando Min le dio un pequeño azote en la cara interior de su muslo derecho.

— Quieta, perrita ruidosa. –ordenó con voz seria, dejando de darle placer al menor– Quien decide cuando parar o seguir aquí, soy yo, ¿entendido?

— S-Sí...

— ¿Sí, qué, Hoseok?

— Sí, daddy. –susurró completamente sonrojado, sus cabellos pegados a su frente por el sudor y sus labios hinchados y rojos por la fuerza con la que había sido besado anteriormente– Daddy, daddy es mi dueño y yo... –tragó saliva y miró a otro lado por la vergüenza– Yo soy su juguete personal.

— ¿Quién lo diría? –rió bajo– Eres una cosita traviesa y llena de fetiches. –se levantó de la cama, sacando de la mesita de noche una cajita de condones y un pequeño envase con lubricante. Yoongi retiró la ropa interior del chico y humedeció sus dedos con el viscoso líquido frío para luego juguetear un poco con su índice su estrecha entrada– Pues bueno... Trataré de cumplírtelos todos, Hoba~ –susurró sobre los labios ajenos, antes de volver a besarlos salvajemente, ingresando el dígito completamente para empezar a preparar al menor.