El Hollow de Konoha

Conflictos familiares

— ¡E-Exámenes Chunin! — Exclamó Hinata.

Habían pasado dos semanas desde que Hinata salió del hospital y una desde que salió su Sensei. En ese periodo de tiempo, han estado trabajando en ejercicios de control de Chakra y trabajo de equipo, tanto en combate como en rastreo.

Los doctores le prohibieron algún movimiento indebido a Kurenai, por lo que su uso de Chakra estaba limitado, esperando que en dos semanas más recobrara casi todo el control de este sin consecuencias de dañar sus bobinas o algo peor.

Ahora, se encontraba el equipo 8 recibiendo formularios por parte de su Sensei relacionados con los exámenes Chunin que se realizaran en una semana.

— Si. Ustedes tres, a pesar de ser Shinobi muy novatos, creo que tienen capacidades para convertirse en Chunin. No los recomendaría sino viera un buen prospecto entre los tres — Explicó Kurenai.

— ¡Esto es grandioso! ¡Lo más seguro es que habrá oponentes fieros! ¡Ho, espero que este ese imbécil de Sasuke! Le voy a eliminar esa cara de arrogancia que desborda.

— Kiba, a veces debes pensar tus comentarios y no contradecir tu propia actitud — Sugirió Shino.

— ¡Ah! ¡¿De qué hablas?! O me dirás que Sasuke es humilde.

— No, pero-

— ¡Pero nada! En este mes que hemos estado juntos sé que tienes sentimientos y lo puedo decir abiertamente amigo ¡Estas tan ansioso como yo de enfrentar rivales fuertes! — Dijo Kiba, interrumpiendo el constante contrargumento de Shino antes que lo soltara.

— Ejem... Los exámenes Chunin tienen la prioridad de buscar cualidades de ninjas Chunin en los Genin que pasen a las estancias finales, no todo puede verse como una lucha — Remarcó Kurenai con voz autoritaria, pero luego relajó la compostura y puso los ojos en blanco — Aunque pelear es parte esencial del mismo así que tan perdidos no están.

— K-Kurenai-Sensei — Dijo Hinata, llamando la atención de todos los presentes.

— ¿Qué ocurre Hinata?

— ¿E-Estas segura que e-estoy lista? Yo... realmente no estoy muy segura de-

— No te subestimes Hinata — Interrumpió Kurenai — Eres mucho más fuerte de lo que crees, todos lo sabemos. Debes confiar más en tus habilidades; si lo haces, estoy segura de que superaras a cualquiera de nosotros.

A pesar de las palabras de reconforte de su Sensei, la Hyuga no pudo evitar ponerse algo ansiosa ante la mención del poder, ¿Su poder? Eso era un completo misterio. En estas ultimas semanas se estaba haciendo más y más presente, como un globo de agua hinchándose de agua en todo su ser.

Pero no se sentía propio, y no se notaba como una buena intención (Tampoco mala). Se dice que las personas temen a lo desconocido y Hinata no podía estar más nerviosa de saber que es lo que ocurría dentro de ella. No podía negarlo, hace unas semanas lo intentó, pero era inevitable negar los hechos.

XXX

El resto del día fue un entrenamiento arduo. Hinata no iba a defraudar a ninguno de sus compañeros al no asistir; pero mentiría si solo fuera por su equipo. De alguna u otra forma debía ver este poder, manifestarlo; como una deidad que sabes que está presente, pero tienes un recurso para averiguar su naturaleza.

La naturaleza era la lucha.

No, no le complacía luchar a diestra y siniestra, no le encontraba pasión a la lucha. La Hyuga veía el combate como un conflicto, un choque de poderes, ideales, conductas. Puede escalar de lo más sencillo a lo más complejo, ella lo sabía. Enfrentar a su hermana en todos estos años a sido prueba de ello y reconfortar ese ideal. No las veía como algo malo, pero no dejaba de ser una barbarie.