Daniel no sabe amar. | Paraboli LH.

Capítulo uno: nuevo país.

Ahora mismo estoy en mi asiento del avión el cuál me llevaría a Chile, recostado en el espaldar y mirando hacía la ventana, esperando que el avión despegara. ¿Por qué iba hacía Chile yo solo teniendo doce años? Fácil, el colegio; Chile es conocido por ser el país con mejor sistema educativo en Latam, por lo qué mis padres decidieron enviarme a estudiar allá, pero no completamente solo pues me iba a encontrar con mis primos: Sebastián y Martín, los rubios más piolas qué he conocido; ellos también habían sido mandados por sus padres a estudiar a Chile, solamente que cada uno iría desde su país hasta Santiago, ahí nos encontraríamos y luego iríamos a donde nos mencionaron nuestros padres que iríamos a vivir mientras pasaba el año escolar.

Estaba algo nervioso, pues aunque no sería la primera vez que vuelo hacía otro país, no era algo que hiciera tan a menudo ¡ni siquiera he visitado la playa aún! Maldigo esta desgracia llamada ser paraguayo (es mentira, me gusta mi país. Aunque también me gustaría que tuviéramos playas). Pero iría con mis primos, tal vez no iba a ser tan malo del todo, pues posiblemente son las personas que más aprecio le tengo, hasta más que mis padres.. Pero no importa eso ahora.

El viaje duraba cerca de cinco horas y media, por lo que saqué mi celular y entré a una página para leer… Fanfics. Sí, esas historias de fans para fans sobre los personajes de una franquicia en las situaciones que se les ocurra, sin límite alguno. Los fanfics eran algo que leía por mero aburrimiento y la situación lo ameritaba.
En este caso, andaba leyendo sobre dos personajes los cuáles trabajaban en organizaciones enemigas pero se enamoraban entre sí, el rivals to lovers de la vida pues, no soy muy fan de la temática pero al menos estaba interesante.

Perdí la noción del tiempo por estar tan centrado en la lectura, cuando me di cuenta, ya faltaba únicamente una hora para llegar a Santiago, y justamente mis primos me escribieron.

la mate mafia 🧉 👍

Maradona: dónde poronga estás Dani, llevamos acá esperándote casi dos horas con el Seba

No sé si sabes que mi vuelo es el más largo entre los tres

Además pudieron situarse en el departamento en lo que lo llegaba

Maradona: ni a palo no quiero dejar a mi primito solo

Aww, más tierno ^^

Pero pq el Sebas no escribe

Maradona: el pelotudo dejó descargado el celular de tanto jugar al Skullgirls

vos sabes lo pajin que puede ser

Tiene sentido

Apagué mi celular con una sonrisa, miré a la ventana y me preguntaba: ¿Cómo será la escuela? ¿Cómo serán mis compañeros? ¿Encontraré el amor cómo en los fanfics de school!au? ¿Veré el mar? Pues ya había aterrizado el avión, y todas esas dudas me las aclaria a lo largo del tiempo que pase por acá.

Saqué el bolso el cual estaba en las cosas esas arriba de los asientos, y salí con cuidado de no chocar con tanta gente, aunque uno me pegó severo codazo en la cabeza. Luego fui a sacar mi maleta, no traía mucho pues mis papás planeaban que gran parte de la ropa y cosas como shampoo, cepillo de dientes y etc lo comprara por acá. A lo lejos logré ver un rubio corriendo hacía mí, y a su lado otro rubio pero con lentes; eran el Martín y Sebas.

── DANIEEEEL. ── El Martín se abalanzó contra mí, casi me tiraba si no fuera por mi gran habilidad de tener equilibrio. ── AL FIN LLEGASTE CONCHUDO, dos horas y media esperándote loco. Así no se puede. ── Me dijo en tono sarcástico mientras me daba varias palmadas en mi espalda.