𝐂 𝐇 𝐀 𝐏 𝐓 𝐄 𝐑 𝐕𝐈𝐈𝐈

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La mirada del joven de cabellos grisáceos se encontraba perdida en un punto fijo del salón, mientras que el profesor explicaba el tema correspondiente ese día. Kim no prestaba absolutamente nada de atención, puesto que se encontraba vagando en su mente repitiendo una y mil veces aquel sueño erótico con los gemelos.

Desde que despertó esta mañana, no pudo verlos directamente a los ojos. Evitaba a toda vista cruzar miradas con los azabaches por pena, además del sonrojo que se apoderaba de él sin poder evitarlo. Los Jeon ya sabían del por qué el actuar de su hyung, pero actuaban como si nada.

El señor con lentes que antes estaba en la pizarra, hoy se encontraba enfrente de Kim TaeHyung, mejor conocido como el come libros y huérfano. Nunca le afectaron esos comentarios que hacían los populares hacía él, más bien los tomaba como inspiración para superarse todos los días. Aunque el bullying que recibía el moreno no llegaba a la violencia, simplemente eran palabras más que todo, por eso el chico de veinticuatro años no se inmutaba ante esas provocaciones, demostrando así un gran nivel de madurez.

— ¿Kim TaeHyung? ¿Estás en mi clase o en la luna? — El profesor tocó con fuerza la mesa del peligris haciendo que este se sobresalte debido al susto que le causo. Subió su mirada topándose con la del mayor, quien tenía una expresión demasiado seria.

— Lo siento, prestaré más atención. — Se levantó para hacer una reverencia para después sentarse y centrarse en aquella pizarra que mostraba imágenes debido al dispositivo que  proyectaba. El maestro suspiro mientras avanzaba nuevamente hacía su lugar.

Las personas en su curso siempre solían hablar de él, ya sea de buena manera, de mala o sexual. Kim TaeHyung desgraciadamente siempre estaba en boca de todos, cuando él solo quería pasar desapercibido. El peligris empezó a escribir los apuntes necesarios hasta que escucho una voz masculina a lado de él intentando hablarle, era Park Ji Min. 

Un joven con la misma edad que Kim, por unos meses mayor. Él estaba en la facultad de coreografía, pero se cambió a último momento al conocer de lejos el precioso atractivo que poseía cierto peligris.

JiMin jamás llego a coquetearle o a decirle cosas obscenas, él estaba consciente de su posición en la vida de TaeHyung; un cero a la izquierda.

Pero eso no quitaba el hecho de que quería entablar una conversación con el moreno.

— Ps, ps.— Hizo un ruido con la boca intentando llamar la atención de TaeHyung, quien dejo de escribir frunciendo el ceño.

— No me llamo ps, ps. — Imitó el sonido extraño haciendo que Park soltará una fuerte carcajada, llamando la atención nuevamente del profesor. 

— Lo siento. — Dijo tapando su boca con ambas manos, Kim lo miro de reojo y evito una sonrisa. — Oye, ¿Te hice reír? — Preguntó emocionado al ver como TaeHyung retenía una expresión. 

— Estoy intentando prestar atención. — Su rostro se volvió serio, recordando las palabras de los azabaches en su guía de;

"Qué hacer si alguien me coquetea y no están mis gemelos favoritos"

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— Número uno, jamás salgas sin nosotros. — JungKook golpeaba una regla en la palma de su mano mientras se paseaba enfrente de Kim TaeHyung. El moreno yacía sentado en el sofá prestando atención a cada palabra que pudieran decir los hermanos. Levantó la mano dudoso haciendo que el Jeon mayor se detenga para que le dé el acceso para hablar. — ¿Alguna duda?

— E-este, yo... B-bueno, si alguien... — Se detuvo para tomar una bocanada de aire, sabía que lo que podía decir los haría enojar. Volteo a mirar a JeonGguk quien estaba deteniendo su espalda contra la pared y sus brazos estaban cruzados de manera relajada. Kim de nuevo, cruzo mirada con JungKook preparado para hablar, cerro sus ojos. — Mi trabajo... Ahí no pueden estar ustedes, al igual que en mi facultad, Kookie... — Intentó hablar despacio jugando con sus dedos sin abrir sus luceros. El azabache con lentes sonrió ladino dejando su lugar para acercarse al pelos grisáceos.

𝐆𝐎𝐋𝐃𝐄𝐍 𝐉𝐄𝐎𝐍'𝐬 ꒰࿔ 𝐤𝐨𝐨𝐤𝐯 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora