Percy*
- ya no se que hacer....
En estoy últimos meses, Annabeth y yo hemos estado teniendo problemas. Pero no me refiero a esa clase de problemas donde discutimos y llegamos a soluciones. No. Hace casi una semana que no hablamos, y ya nisiquiera recuerdo porque peleamos. Esos han sido nuestros últimos meses. Peleamos, alguno de los dos actúa como si nada hubiese pasado y a los cinco minutos, 'pom', ya estamos enojados de nuevo.
- ¿a que te refieres, Jackson?- Jason ha estado conmigo en estas épocas tan difíciles, pero ni siquiera él sabe que hacer.
-Sabes a que me refiero, Grace. Annabeth y yo...- niego con la cabeza y de un centón me dejo caer sobre la cama de mi departamento. Ya que los ataques de monstruo disminuyeron drásticamente, conseguimos unos departamentos en Brooklyn a 50 kilometros de la carretera que lleva al campamento por si se presentan dificultades.
Todos nuestros amigos viven en la cuidad ahora... excepto... Nico...
- Vale, vale... mira...- Jason pone su mano en su nuca y baja un poco a la mirada mientras se levanta del sofá negro que esta frente a la ventana del dormitorio y camina hacia mi. Se sienta a mi lado y recarga sus codos en sus rodillas - tu y Annabeth han estado juntos por hace ya bastante tiempo. Yo creo que es algo normal que a estas alturas estén... teniendo dificultades.- con los dedos índice y medio de ambas manos hace unas comillas enfatizando esa última palabra. - tal vez lo que les hace falta es tiempo. - me mira con ojos nerviosos y sonríe un poco mientras se encoge de hombros.
-Grace... creo... creo que tienes razón. - exhalo de golpe y relajo mis hombros. Ahora que tengo 19 años me es más fácil ver las cosas con un modo más optimista, aunque nunca me faltó ese detalle.
Jason me sonríe por última vez y mira su reloj digital en su muñeca, sus ojos se abren de golpe y se levanta de un salto de la cama
-Por los dioses, es tarde. Piper me matará si perdemos la reservación a ese restaurante- sonrió y me levantó algo divertido por ver a Jason así. Él toma su chaqueta azul del Buró que esta frente a mi cama, cruza la recámara y la sala como un rayo. Abre la puerta y sale pero justo antes de cerrar se asoma añadiendo - piensa en lo que te dije... tal vez un tiempo les haga bien.- sonríe por última vez y sale soltando un portazo dejándome con tantas dudas como sólo Jason Grace sabe hacer.
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Nico*
Después de lo que parecieron ser mil viajes en sombras para traer mis pertenencias a este lugar siento el deseo de tomar un descanso en el sofá de piel sintética marrón que he colocado en la sala de estar.
Hace ya varias semanas que había preparado mi mudanza a la ciudad pero no quería que nadie se enterara. Debía tratar de tener una vida normal después de todas aquellas batallas y monstruos de los pasados años. Aunque, claro, ¿que vida normal puedes esperar cuando eres un semidios y tu padre es Hades, uno de los 3 Grandes? Aún así todos estaban llevando sus vidas y trataría de hacer lo mismo.
Mi departamento se encontraba del otro lado de Manhattan, cerca del Lago Harlem y lejos del campamento, lejos de mis recuerdos... lejos de Percy.
Suspiró profundamente y miró como ha quedado el departamento. La sala esta en la entrada, paredes blancas con sillones y una mesita de centro marrón y una alfombra beige. El mismo pasillo de la entrada conduce a una cocina pequeña que tiene murbleria de madera, una barra por comedor que da hacia una ventana con vista al lago y una pequeña terraza en el balcón. A la derecha de la cocina se encuentra mi recámara y al lado de mi recamara hay un baño completo.
Creo que vivir en la cuidad me hace bien.
