𝐌𝐔𝐋𝐓𝐈𝐕𝐄𝐑𝐒𝐄 (steddie) [EN EDICIÓN]

6. PROM KING (2/2)

El juego terminó y el equipo de Eddie y Steve salió victorioso por fortuna, quedando una vez más como finalistas.
Edward salió del gimnasio y se escondió bajo las escaleras, prendió un cigarrillo y se relajo mirando el atardecer.

—Tienes uno que me des?–una voz apareció de la nada asustando al pelinegro.

—Mierda, avisa que estás acá.– extendió su cajetilla y el chico saco un cigarrillo.– tienes encendedor? El mío murió recién.

—No te preocupes –Steve se acercó juntando los dos cigarrillos prendiendo el suyo rápidamente, pero aunque ya pudiese apartarse no lo hizo, simplemente no quería apartarse de ahí y le sorprendió que Edward tampoco se moviera, era extraño si pero no les incomodaba. Se apartaron cuando la ceniza empezaba a caer y sus labios dolían por la presión.

Ninguno dijo nada y no querían decir nada, romper el cómodo silencio se sentiría como un crímen. Steve se acomodo a su lado observando cómo el sol se escondía detrás de los árboles y el frío aire recorría sus rostros.

—Sabes por qué te golpeaba?

—Porque eras un idiota.

—Porque me gustabas Eddie, y me enojaba que me gustaras, no quería quedar como un imbécil delante de mis amigos pero me dolía ver cómo llorabas, no sabes cuántas veces quise confesarme, abrazarte y pedirte perdón, pero ya era demasiado tarde o eso pensé, fui un idiota y tienes el derecho a odiarme si quieres, solo.. no le digas nada a mis padres, porfavor.

—Mierda, mierda, mierda.. cuánto te pagaron Harrington?

—Ojala fuera una broma Munson, ojalá lo fuera. –Dio una calada a su cigarrillo y se puso de pie, pero una mano le sujetó de la muñeca.

—¿Por qué? Por qué te guste Steve? – Edward miraba un punto fijo sujetando con fuerza al otro. – Por qué mierda no me lo dijiste antes? Por qué yo?

Steve se sentó nuevamente está vez frente a frente con el pelinegro.

—Porque no te importaba una mierda como los demás te , solo eras tú y que se jodan,eras opuesto a mi y me parecias un chico único pero no fue opción decirte nada, se burlarían de mi por ser el amigo del freak, era un idiota. Ahora me doy cuenta de todo lo que me perdí queriendo encajar, lo siento tanto Eddie, lo siento tanto. –Steve ya no podía contener las lágrimas, nunca había llorado delante de nadie pero sabía que Eddie no lo juzgaria, podría hasta golpearlo pero el no se burlaría de Steve por llorar.

—A la mierda esto.

Munson le tomo de las mejillas bruscamente y le besó, un beso que los dos algún día soñaron pero nunca se atrevieron a intentar por miedo. Un beso con sabor a tabaco y lágrimas, Eddie se separó para ver los ojos llorosos y mejillas rosadas de Steve.– Eres un idiota pero ya te perdone.

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Última competencia: disfraz

—Y los últimos dos finalistas son.. Steve Harrington y Edward Munson! –resonaron los aplausos por todo el gimnasio, en el escenario se encontraban Eddie y Steve con sus disfraces de vampiro gótico y Elvis Presley respectivamente.–En un momento se decidirá quien será rey del baile de invierno.

Se les dió un pequeño descanso dónde pudieron bajar del escenario.

—Tu disfraz es ridículo.

—A las chicas les gusta, a ti no?

—Y a mi qué mierda me importan las chicas. –Su semblante cambio completamente a uno serio y se adelantó saliendo del gimnasio, Steve le siguió.

—Que te pasa? Parece que hubiera dicho algo mal.

—Solo.. me quiero ir de aquí.

—Irnos? Edds, tenemos que estar aquí, somos candidatos a reyes del baile, no es cualquier cosa a la que puedas retirarte sin más.

—Pues yo me iré, ahí ves.– el pelinegro se dió la vuelta y empezó su caminata que fue interrumpida nuevamente por Harrington.

—Ya dime qué pasa.

—Lo que pasa es que todos nos ven como algo raro! como si fuéramos animales exóticos o mierda así, no puedo ni hablarte porque tus amigos de mierda parecían querer matarme, y las chicas te ven con una cara que me da náuseas Steve, si tan solo te dieras cuenta de la diferencia de como se dirigen a mi de como te alaban a ti, yo no quiero esta mierda de baile.. solo quiero estar contigo okay? sin que todo el mundo nos mire y hable a nuestras espaldas, vámonos de aquí.

Harrington tomo la mano del contrario y caminaron, no tenían idea de dónde se dirigían pero estaban juntos bajo la noche estrellada, de vez en cuando Steve secaba las lágrimas de Eddie y plantaba un tierno beso. No era necesario decir una palabra para expresar sus emociones y pensamientos.

Y así siguieron caminando hasta que las lágrimas y sollozos se convirtieron en sonrisas y besos.

perdón si esto fue muy corto, no tenía más imaginación ksndldk