—De alguna u otra tengo que seguir con esto.
Siwon acababa de discutir con su padre, que aquel era muy estricto con él, normal para un joven de 19 años.
El hombre le prohibía cualquier distracción que estorbara en el camino de Siwon, el camino que su padre ya le había planeado incluso antes de que éste naciera. Su madre sólo podía recordarle a su hijo algo que jamás olvidaría antes de dejar este mundo.
—Haré lo que me apasiona, no voy a fallarte —se dijo a sí—. Y tampoco me voy a fallar.
Haz lo que te apasiona, fue lo que le había dicho, fue lo que le inculcó aquella fuerte pero bondadosa mujer; siempre le decían que se parecía tanto a ella.
Feroz pero cálido.
Los recuerdos eran borrosos, sólo podía recuperar los momentos dónde sus padres discutían y; a sus ojos era por él. Culpa suya.
Lo único que lo distraía era ir afuera con su guitarra y tocarla por su cuenta, le prohibían clases de otra índole que no fueran cursos para la escuela.Siwon era un niño bastante inteligente, ya sus conocimientos se reflejaban desde que tenía tres años, aprendió a leer y a los 4 ya sabía sumar e incluso las tablas de multiplicar, su padre al saber que su hijo era prodigio le exigía más y más conforme el pequeño iba creciendo.
Todo empezó a tambalearse cuando iba a entrar a la universidad.
Para su padre Siwon se le había salido de las manos, era un completo caos. Aquel pequeño niño lindo y obediente se estaba convirtiendo en un rebelde, de esos que ni un día en la correccional le darían un escarmiento.
A ojos de su padre, claro.
Lo forzaba a trabajar con él en sus negocios y sorpresivamente no renegó a aquella casi obligación, pensaba que ya había aceptado que el legado de los Choi estaba en sus manos.
Más equivocado no estaba.
—¿Eres Siwon? —una voz lo distrajo de sus memorias.
Giró la cabeza, un joven de cabellos castaños y ojos cafés lo estaban observando con una sonrisa bien puesta.
Siwon efectivamente no lo reconocía de algún lado.
—¿Nos conocemos?
—Tú no a mí, pero yo a ti sí.
Siwon siguió con la misma duda.
—Mi padre trabaja en la compañía de tu padre.
—Oh —lo miró con una cara sorpresiva.
Kyuhyun volvió a tomar la palabra con un gesto más serio.
—Siento mucho lo de tu madre.
Siwon asintió con la cabeza; era amargo todavía pero no quería ser grosero ni pensar en ello, no en ese momento.
Para romper el momento preguntaron mutuamente cuál eran sus bandas.—Es Rage —señaló un logo que estaba a pocos metros de ellos.
—Megadeth —por el contrario, solamente dijo su nombre—. No tengo dinero para costear un logo ahora.
Burló.
—Creía que... —dijo incómodo—, tu trabajabas con tu padre.
—Es complicado explicarlo.
Siwon estaba empezando a sentirse incómodo e inseguro el cómo iba la conversación; decidió cortar la conversación con un 'suerte' y huir de ahí. Sin si quiera poder ver si Kyuhyun se estada despidiendo de él.
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B. O. B
RomantizmSiwon, líder de la banda 'Megadeth' es un chico que sobresale de el estereotipo promedio de lo que es ser un músico de género pesado. Kangin, que al mismo tiempo es su rival, líder de la banda 'Death' se ven forzados a trabajar juntos en un programa...