•UNO•

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Andrés no iba a mentir, amaba trabajar en el bar Alcalá. A pesar de todos los problemas que tenían Rosario y su familia el sabía perfectamente como separar su vida profesional de su vida personal. El solo estaba ahí para expresar su ser con la música, cómo el día de hoy. El bar estaba a su máxima capacidad, personas bailando al ritmo de la música de su banda, otras personas en la barra bebiendo entre amigos en un ambiente totalmente ameno.

Entre la multitud conocida, ya que la mayoría de las personas que estaban ahí frecuentaban mucho el bar, algunos eran amigos suyos y otros personas que veía por la ciudad, no es que fuera una ciudad muy grande, las personas en San Marcos se conocía entre todos al menos de vista. Pero hubo una persona que destacaba de entre todos, un rostro nuevo para Andrés.

Aquel hombre de camisa azul bailando con un grupo de chicas, ojos de color, barba prominente el cual no era alguien conocido para Andrés por lo tanto llamo inmediatamente su atención meintras tocaba el acordeón en el escenario. Cruzó unas cuantas miradas con el chico quien le sonrió inclinado su cabeza. Ok, Andrés debía admitirlo, ese hombre era muy atractivo.

No era un secreto para nadie que Andrés era abiertamente gay, fue a sus 15 años cuando descubrió su orientación sexual, era un tema desconocido para el pero después de preguntarle a su primo Juan David sobre ello este le dijo lo poco que sabía y que había aprendido de su tío Leandro. No fue difícil para Andrés aceptarse, aún cuando las personas del pueblo eran algo cerradas de mente, nunca dejo que las críticas lo hicieran sentir mal. Fue cuando cumplió 17 años que decidió contárselo a sus padres. Sarita y Franco no sé esperaban completamente esto pero no dudaron ni un segundo en apoyar a su hijo.

Cuando la canción dió fin era tiempo para un intermedio de la banda antes de comenzar la segunda parte del show. La música del DJ había comenzado a sonar por lo tanto los chicos dejaron sus instrumentos en su lugar y bajaron del escenario a convivir un rato mientras llegaba el segundo acto. Andrés caminaba entre las mesas saludando a algunos amigos que veía por ahí hasta que la voz de Rosario lo llamo.

—Andrés, ven –Gritó la mujer para hacerse escuchar sobre todo el ruido del bar. —Acompañanos, te voy presentar a alguien muy pero muy especial para mí. —El mencionado se acercó hasta donde estaba la mujer quien se levantó para recibirlo.

–Buenas, un gusto -Saludo a las personas de la mesa mientras se dirigía a Rosario.

—El es el director musical de mi banda, joven talentosisimo, un profesional impresionante. El es Albin —Andres observó cómo el chico que anteriormente había visto bailar se levantaba con una sonrisa, de cerca era mucho más atractivo debía aceptarlo.

—Albin Duarte –Exclamo el hombre dejando notar un acento no muy común en su área —¿Andrés? —Pregunta mientras lo señala.

—Si, Andrés Reyes -Se presenta con una enorme sonrisa.

—Mucho gusto —Estira su mano hacia el y Andrés le estrecha sacando una sonrisa del mayor mientras se miran fijamente a los ojos, sin duda iba a ser un chico interesante de conocer.

Ambos se sentaron a un lado de Rosario y los demás en la mesa para conversar un poco sobre lo que Albin hacía en el pueblo. Ahí fue donde se enteró que era Español y uno de los mejores caballistas de su país, había venido a San Marcos para concursar en algunas muestras de caballos dea feria como cada año lo hacía. Si Andrés nunca se hubiera negado a asistir a las ferias con sus padres y tíos, seguro lo habría visto en alguno de los años anteriores.

Pero Andrés algo tenía seguro, quería conocer mejor a ese hombre y ver si podían llegar a algo juntos, el era un Reyes y los Reyes nunca se daban por vencido con sus intereses.


Me cansé de imaginarme todo lo que pasaba entre que se conocieron hasta donde comenzaron una relación Andrés y Albin así que me decidí a escribir mi versión de cómo se fueron conociendo hasta llegar a ser novios.

No se esperen un fic muy bien narrado, llevo 5 años con bloqueo de escritor así que haré todo lo que pueda.

La historia no contada • Andrés y Albin • Pasión de Gavilanes 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora