-Lo siento, solo quería evitarnos un regaño o quizá un reporte-
Lo mire mal por un segundo lo cual nos causó risa a ambos, estar con él es extremadamente cómodo, me gusta lo poco y nada que nos une.-Te perdono sólo si me compras un café, tengo algo de frio- Sople sobre mis manos indicando que tenia fría lo cual no hacía falta pues ni nariz estaba roja.
-De acuerdo, vamos a la cafetería-
Nuevamente tomo mi mano con calidez, haciendo que esta empezará a sudar, así que me Solté de su agarre y para no mal interpretar las cosas le Jugué una carrera sin decir nada, era obvio que el me seguiría pues siempre lo hacía.-Eso no es justo no estaba listo- estaba reclamando cuando ambos llegamos y claro que yo llegue primero que él.
-De esos se trata, tengo que llevarte ventaja- Reí tratando de no colapsar porque no podía respira, todo era aire frío se había metido a mis pulmones y me costaba respirar sin que doliera hacerlo.
-¿Estas bien?- Se acercó demasiado a mi podía sentir su cálido aliento calentando mis mejillas, eso me ponía incomoda, la idea de pensar en un beso no me agradaba mucho.
-Si, es sólo que, me cuesta respirar, el aire es tan frio-
Beso mi frente, haciéndome entrar en la cafetería.-Aquí te vas a calentar, y podrás respirar bien, ya veras. Espérame aquí yo iré por tu cafe-
-De acuerdo- le regale una sonrisa, era lo único que podía hacer, aunque no les niego que me hubiera gustado regalarle un beso, para el es tan sencillo, pero a mi me cuesta hacerlo, y quizá sea porque no somos más que amigos y no besaría a un amigo.
Pose mi vista por un segundo en su espalda, estaba apreciando todas sus facciones, era raro, pero algo me obligaba a hacerlo, podía ver su perfil y lo perfecto de su nariz, tal vez estaba siendo muy obvia pues sintió mi mirada y se giro rápidamente, pero antes de que lo hiciera lo hice primero.
-Aquí tienes, bien caliente-
Reí por su comentario, me parece demasiado tierno.-Esta bien, te lo agradezco, en verdad lo necesito, casi hago que mis pulmones se congelen-
-Deberías evitar correr por las mañanas, anda toma tu café, tenemos poco tiempo para regresar-
-De acuerdo, no seas mandon-
-No lo soy, pero tu sabes que debemos regresar a clase-
Reí ligeramente, solo me gustaba jugar con él. -Claro, solo juego- Tome el vaso de café y sople varias veces hasta que este se enfrió y pude beberlo.
-Oye sobre el viaje, ya tienes pensado que harás-
-No, aún faltan dos meses y bueno, creo que eso lo decidiré allá, es enorme y me gustaría ir a todos y cada uno de los lugares que existen-
-Eso sería imposible con tan poco tiempo, pero si puedo llevarte a los mejores lugares-
-Esa idea me agrada, aunque si hay un lugar al que quiero ir-
-Enserió,¿y cuál es? -
Su cara mostraba mucha emoción y la mía probablemente también lo hacía, sentía mis mejillas arder aunque no se si era por el café o por Alex.
-Eso te lo diré cuando estemos alla-
Tome el vaso de la mesa y me levante en señal de que era hora de irnos.-Espérame y no vallas a correr a y no estoy siendo mandon, solo trato de cuidar de ti, ya que tu no lo haces y a ese paso no llegaras a Corea-
-Esta bien-
No dije nada más, solo camine a su lado hasta llegar al aula; Alex estaba haciendo mi estancia un poco más divertida, me empezaba a gustar venir a la escuela y eso es raro, pero me agradaba pasar tiempo con él.
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Tocando las estrellas
Подростковая литератураVictoria, una chica temerosa e insegura, pero soñadora, con la ilusión de algún día llegar a significar algo para aquel chico de la televisión que le dio un nuevo significado a su vida, se oculta tras las paredes de su habitación en donde cada que...