Hace varios años en una pequeña ciudad de la que no se sabe mucho había un hotel, no se sabe quien o cuando lo construyeron, lo único que se sabe es que nadie lo habita, y el que llegue a entrar no saldría cuerdo, ya que se dice que dentro hay fantasmas que embrujan el lugar, espectros aterradores que solo existen para atormentar a las personas ignorantes que llegaran a pisar aquel hotel.
Una mañana un hombre llegó a la ciudad, ya que se rumoreaba que el hotel estaba lleno de objetos valiosos los cuales planeaba robar, para él era normal esa clase de trabajos, simplemente era entrar y salir, o eso pensaba, tenía claro lo que quería y sabía lo que podía hacer y cómo hacerlo para no ser descubierto. Busco imágenes del interior del hotel, pero extrañamente encontró muy pocas, y casi ninguna le ayudó a hacer un plan de escape, luego optó por buscar los planos, los cuales tampoco fueron de ayuda. Aunque ya tenía un plan, debía ponerlo en marcha, empezó a preparar lo que necesitaba: un rompe vidrios, un martillo y otras cuantas cosas, se miraba muy profesional, ya que tenía mucha experiencia en eso, sabía que llevar y no llevar para que todo saliera bien. Esa noche se decidió a ir, al parecer no tenía miedo de lo que pudiera habitar dentro de aquel edificio embrujado. Tomó sus cosas y sin mucho más que pensar fue a aquel lugar.
Ya en este, tomó el martillo y un destornillador para forzar la cerradura, sorprendentemente la puerta no estaba con seguro y era solo empujarla y entrar, adentro decidió subir al segundo piso y revisar los apartamentos, dio algunas vueltas y noto una puerta abierta, pensaba que alguien se le había adelantado y que quizá estuviera cerca, se acercó con cuidado para que quien estuviese ahí no lo escuchara, se asomo y noto a unas raras estatuas blancas sentadas mirando directamente al televisor, en el cual solo se notaba estática y su sonido correspondiente. El hombre sorprendido y algo confundido las observó por un tiempo, parecía ser una representación de una familia: eran un niño, una niña, un hombre y una mujer, los cuales estarían sentados uno al lado del otro, mirando directamente a aquella estática antes mencionada.
Luego de su observación el hombre con algo de miedo entró lentamente al apartamento, noto unos trofeos en una hermosa vitrina de madera y unas figuras de colección, parecían ser caras, el hombre no se lo pensó mucho y lo tomo todo, metiendolo en su bolso, pero no le quitaba la mirada a esas estatuas que aún lo intranquilizan, vio dos pasillos, uno que llevaba a la cocina y otro a los cuartos. Al terminar de meter los trofeos en su bolso va a los cuartos a revisar que había, no encontró nada interesante, así que simplemente salió de las habitaciones, al regresar se dio cuenta de que esas estatuas ya no estaban mirando el televisor, el cual ahora se encontraba apagado, si no que estaban viéndolo directamente a él. El hombre tiró la bolsa y corrió afuera bajando las escaleras rápidamente, asustado y agitado, con el corazón a mil, sudaba. Lo peor fue cuando bajo y no había puerta, este volteo, dándose cuenta que una multitud de estatuas estaban paradas detrás de el mirandolo desde las escaleras, todas blancas, parecían de marfil, la luz se reflejaba en su superficie cristalina y clara. El hombre aún más asustado mira a todos lados y encuentra una pequeña escotilla por donde pasaba el aire, una salida de ese lugar horrible, sus ojos brillaron y sin pensarlo mucho corrió hasta ella, se agacho para entrar, pero cometió un gran error, antes de irse volteo a ver si había alguna de esas cosas cerca… y… Ahí estaba, aquella estatua que parecía ser el papá, lo miraba a los ojos, los cuales reflejaban miedo, desesperación, resignación. Ya era muy tarde para escapar, el brazo de la estatua yacía atravesando su pecho, la sangre corría por sobre la ropa del hombre y manchando sus prendas de rojo. Este miró a su alrededor y noto que ya no había más de esas cosas, solo el… Y su asesino... Fin
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Archivos RIPP - Manuel Adrianza
Horrorexisten seres desastrosos, seres malvados que quieren ver el mundo arder, existen seres que solo buscan el sufrimiento de todos los seres vivos y que sientan el dolor que ellos alguna vez sintieron... Por venganza, por maldad, o simplemente por dive...