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El silencio estuvo unos momentos mientras el menor de los tres estaba sintiendo su final más cerca de lo que había esperado

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El silencio estuvo unos momentos mientras el menor de los tres estaba sintiendo su final más cerca de lo que había esperado.

Realmente no tenía presente que Tsukasa aparecería en algún momento, después de todos se supone que la relación que tiene Hanako y el otro no era nada buena, más ahora que lo pensaba... Quizá esto también fue una actuación...

Quizá ambos... Le querían destruir de formas distintas.

El de sonrisa juguetona ha hecho varias cosas, y también burlado de él, no es tan diferente en cuanto a su ahora secuestrador.

Se removió un poco deseando liberarse de las manos que no le dejaban moverse y lo mantenían contra el frío suelo del lugar.

— Wow, ¿Acaso este es ese rubio que siempre te acompaña como perro? —

— ¿Que quieres, Tsukasa? —

— ¿Hm? Oh, vamos. ¿Acaso mi querido hermano ya no me quiere? —

— Tsk, eso... No tiene nada que ver —

— Bien, bien, en fin, ¿Por qué tienes casi desnudo a el cabeza de bombilla? ¿Acaso...? ¡¿Estas haciendo cosas sucias?! Pervertido~ —

— ¿Eh? No... —

— Vamos, no es tan difícil. Además, no hay otra cosa más lógica para que lo tengas así —

— ¡No teníamos eso! ¡A mi no me gusta ese idiota! —

— Cierto, tu amas a la tonta daikon-chan —

— No digas eso de senpai —

Los gemelos dirigieron su mirada al chico que pese a estar indefenso por como estaba tomado, no perdía la oportunidad de defender a cualquiera que aprecie.

—Callate, niño —

Aquella mirada se volvió negrusca nuevamente por unos momentos, en serio que le molestaba el como ese chico no paraba de hablar.

El menor Yugi miraba todo en silencio. Su razón principal para venir era para molestar un poco a su hermano, más ahora se había encontrado con esto, y claro, se notaba que ese exorcista no la estaba pasando nada bien.

Internamente sabe que debe detenerlo también ya que, con el paso del tiempo ha tenido una sospecha que no ha podido quitar de su ser, más nunca había probado aquello.

Quizá ahora deba hacerlo.

Camino con calma y al notar que el mayor estaba distraído viendo a el se cabellera rubia aprovecho eso para apartarlo y con ello notar su confusión.

— Ya que te llevas tan mal con él... Quizá deba probar algo que estoy seguro que a él le gustara —

Se acerco y acomodo sobre el vivo que parecía más confundido que antes y también con unos gritos internos pidiendo la ayuda de alguien.

ғᴇᴀʀ [ʜᴀɴᴀᴋᴏᴜ] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora