Scott MCcall el Mikaelson (PAUSA Y CORRECCIÓN)

CAPITULO 7

Un nuevo día, un nuevo comienzo, una enérgica y ligera Caroline Forbes llegó a la escuela el lunes por la mañana, lista para afrontar el día con una sonrisa en el rostro.

Se sentía mejor de lo que se había sentido en mucho tiempo y si las miradas que estaba recibiendo mientras caminaba hacia su casillero eran algo a lo que atenerse, entonces también se veía mejor. La charla con su madre resultó ser muy buena para ella, para ambas y para su relación.

La sonrisa desapareció en el momento en que el vampiro vio la mirada triste en el rostro de Bonnie que la chica inmediatamente pintó al revés en el momento en que captó la presencia y la felicidad de la otra chica.

Los dos se encontraron a mitad de camino, pero antes de que pudieran conversar, todo el pasillo quedó en silencio, enfocándose en el grupo que acababa de entrar al edificio, encabezado por dos niños, aunque el más alto y de aspecto mayor de los dos estaba más a la cabeza, mientras que el más bajo y más joven era un chico rubio  y detras de ellos haba un pequeño ejército de niños y niñas.

La vampiro y la bruja estaban un poco confundidas ya que no sabían quiénes eran los estudiantes pero no podían negar que eran todo un espectáculo.

Alto, moreno y guapo fue lo que vino a los pensamientos de Bonnie en el caso de que el mayor usara botas en lugar de tenis como todos los demás, y bajo, ligero y lindo en el caso del más joven. Pero esos eran solo pensamientos inocentes.

Como no había pensado mucho en Matt desde su conversación con su madre, Caroline se encontró considerando la idea de quedarse con uno de los dos niños, preferiblemente el mayor.

Liam luchó duro para reprimir un sonrojo cuando olió todas las señales de pensamientos que volaban salvajemente de los estudiantes de la preparatoria Mystic Falls y escuchó que comenzaban los susurros.

Era como comenzar de nuevo en una nueva escuela como el niño nuevo, pero el tipo de niño nuevo que recibía la atención positiva tanto de mujeres como de hombres.

"Hola, ¿podría mostrarme dónde está la oficina de administración?"

El niño escuchó a su alfa saludar y preguntarle a un estudiante local al azar que resultó ser una niña y estaba bastante seguro de que se mostraba una sonrisa encantadora.

"Um, uh, s-claro. Justo..."

"¡McCall! ¡Deja de coquetear con los estudiantes locales y ven aquí! ¡¿Qué clase de ejemplo le estás dando al equipo?! ¡Ve a la oficina ahora y coquetea después!" Interrumpió el entrenador Bobby Finstock, apareciendo en una esquina frente al pasillo.

Hubo silencio una vez más después de eso.

"Está bien, entrenador". Dijo Scott, rompiendo el silencio después de un momento.

"¡Ese es mi chico!" Eso hizo que los estudiantes de Beacon Hills High School se rieran de la interacción, les hizo sentir como si estuvieran en casa.

También sabían que las posibilidades de que su ex capitán coqueteara al azar eran casi inexistentes. El chico tenía chicas y chicos arrojándose sobre él en casa desde que Kira se fue, pero educadamente los rechazó a todos, aunque a veces Malia hacía eso por él, pero no tan educadamente.

"Eh, gracias". Dijo Scott, diciéndole eso a la estudiante local con el que estaba hablando anteriormente con su sonrisa amistosa nuevamente.

Ella asintió en respuesta y eso fue todo, todo volvió a la normalidad.

"Oh, amigo. Y tengo que lidiar con un entrenador durante los próximos dos años". Gimió Liam mientras caminaban hacia la oficina de administración.

"Él no es tan malo y puedes manejarlo". Respondió el Tribrido, palmeando a su beta en el hombro.