11/09/22

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Hoy después de hace mucho tiempo tuve una cita conmigo misma, sonará raro pero sí así fué, me gustó mucho, me arreglé con entusiasmo me maquillé, me vestí como más gusta, tomé mi cartera, me puse los auriculares y me despedí de mi gato; para mí suerte ni bien salí llegó el colectivo y que creen ésta ves si hubo un asiento libre, junto a la ventana donde no me llegase el sol, ahí me perdí en mis pensamientos, recordé muchas cosas y reflexioné sobre ello, sinceramente no sabía ni a dónde ir puesto que no suelo salir y a decir verdad no tengo con quién, en fin ya casi estaba por llegar a la parada final del colectivo y fué ahí donde sin pensarlo decidí bajarme, cruce a la acera de enfrente para caminar en dirección contraria a la que venía, caminé por la acera escuchando música, sintiendo como el viento hacía que mi cabello se desorden, me gusta esa sensación, caminé sin dirección específica, llegué a un lugar con muchos árboles y el clima estaba templado, me percaté que había un banco libre con una vista hermosa, también ví una heladería y no estaba muy segura de comprar un helado, me quedé pensando y decidí comprarme un helado, al ingresar habían muchas personas dentro, lo habitual amigos, familia y una pareja que disfrutaban su helado mientras conversaban, fué ahí donde me dí cuenta que estoy sola aunque no sentí ninguna sensación de envidia así que seguí esperando en la fila mientras pensaba en que sabores ordenar; por fin llegó mi turno y escogí sabores al azar porque no me dió tiempo de elegir ya que había muchas opciones, opte por elegir maní, melón y mi favorito chocolate, salí del establecimiento a sentarme en aquel banco libre, pero cuando llegué ví que ya estaba ocupado, caminé un poco y encontré uno mejor, me senté y comencé a degustar mi helado,  descubrí que mi nuevo sabor favorito es el helado de melón, al terminar se me acercó una paloma y como el barquillo no me gustaba mucho decidí partirle en pedazos pequeño y dárselo a las palomas que también se acercaron, mientras observaba el atardecer recordé que el lugar donde me había sentado se me hacía familiar, sí ya estuve ahí antes, me senté con la persona que me hizo una promesa que jamás cumplió, esa noche era perfecta para mí bueno siempre lo era cuando estaba con él, la noche estaba estrellada la luna nos sonreía mientras irradiaba con su brillo, nos tomamos de las manos mientras miramos el cielo y prometimos estar juntos, fue imposible evitar derramar una lágrima, es gracioso no? Y pensar que ya pasó unos años y yo estaba en ése mismo lugar recordando el pasado, me dí cuenta que no esperamos el futuro ya que no es algo predecible un día estamos felices y al otro no, me quedé recordando el pasado y lloré en silencio, ya comenzaba a sentirse el frío y si me seguía quedando ahí de seguro me enfermaría, camine con dirección a un lugar muy concurrido a ver qué encontraba por ahí, para ser sincera odio los ligar con mucha concurrencia es decir dónde hay muchas personas al rededor, nada Interesante pasó ya oscureció y ya era de volver al infierno de mi dulce hogar.

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⏰ Última actualización: Sep 12, 2022 ⏰

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