El desfile estaba por empezar y detrás del escenario el pelinegro era un manojo de nervios.
¡Iba a desfilar para Salvatore Ferragamo! aún no lo podía creer, desde que hace un par de días atrás su rostro fue la portada de las revistas más importantes del mundo sus seguidores en redes sociales habían crecido en números exorbitantes y varias marcas habían querido contactar con él, todo parecía tan irreal que tenía miedo de que solo fuera un sueño.
—Tranquilo, lo harás bien —dijo Taehyung— eres el mejor.
—No sé qué haría sin ti, Tae —dejó un beso sobre sus labios— gracias por estar aquí.
Anunciaron su nombre y se tuvo que ir, salió a la pasarela donde varios flashes lo apuntaban, dejando a un lado sus nervios comenzó a caminar con un paso muy pulcro haciendo lucir la ropa que llevaba puesta, su rostro que en un principio estaba serio cambió de expresión cuando sus ojos se encontraron con los ojos de una persona que conocía a la perfección, ¿acaso esto era una broma del destino? volvió a su expresión inicial y terminó la pasarela volviendo al backstage para cambiarse de ropa y salir nuevamente en un par de minutos.
Con la cabeza en otro lado dejó que el staff lo terminara de arreglar para su siguiente salida, ¿de verdad era Jimin? o quizás solo se lo estaba imaginando, no había forma de que se encontraran de nuevo y mucho menos en Italia.
Cuando de nuevo fue su turno salió buscando disimuladamente con la mirada al rubio pero ya no estaba, definitivamente su mente le estaba jugando una mala pasada.
ººº
—¿Qué voy a hacer? —el rubio caminaba de un lado a otro en el baño muy nervioso por la presencia de Jungkook.
¿Qué hacía él aquí? por qué nunca le dijo que trabajaba para esta marca, si lo hubiera sabido jamás habría asistido.
Jimin quería irse, necesitaba hacerlo pero eso sería demostrar debilidad ante el pelinegro y eso era algo que no estaba dispuesto a hacer así que inhaló y exhaló repetidas veces tomando valor y salió con la frente en alto volviendo a su asiento junto a San.
La pasarela terminó y se dió inicio al after party, todos los modelos hacían acto de presencia con unos vestidos y trajes preciosos, mas Jimin no se sentía opacado para nada, él estaba a la altura de todos, no por nada ya había rechazado a tres chicos en lo que iba de la noche, ninguno le interesaba, solo uno que justo ahora se encontraba a unos metros de él con un castaño colgado de su brazo, el rubio estaba tolerando eso pero no pudo más cuando Jungkook besó a su acompañante.
—Ahora vuelvo —le dijo a San y este solo asintió mientras conversaba con otros empresarios que también estaban ahí.
A pasos lentos pero seguros se acercó por detrás hasta donde el pelinegro y el castaño estaban, se aclaró la garganta y habló.
—Hola —dijo haciendo que las dos personas giren en su dirección.
Jungkook escaneó de pies a cabeza al rubio, lucía malditamente sexy en ese ceñido traje rojo y esos ojos solo lo incitaban a pecar, sus labios se entreabrieron ante las sensaciones de su cuerpo olvidando por un instante que estaba rodeado de personas.
—Hola —respondió Taehyung— ¿nos conocemos?
—No, soy Choi Jimin y solo venía a felicitar a Jungkook por su destacado desempeño el día de hoy —sonrió mirando al pelinegro— y también le venía a proponer algo.
—¿Qué es? —habló por primera vez Jungkook.
—No sé si saben pero soy el futuro dueño de "Good Food" —tanto Tae como Jeon quedaron boquiabiertos, esa empresa era la más grande de alimentos de todo el país era imposible no conocerla— y bueno, estamos por lanzar un nuevo producto y quisiera contratarlo para la publicidad, si le parece podríamos hablarlo en un lugar más... privado —dijo mordiéndose el labio inferior, cosa que pasó desapercibida para el castaño más no para Jungkook.
—No creo que-
—Si le parece —respondió Tae— vayan a hablar, yo te esperaré aquí.
Jungkook aceptó poco convencido y antes de ir tras el rubio besó a Taehyung.
Junto a Jimin caminó hasta un lugar del local que contaba con poca iluminación, era perfecto para lo que el rubio tenía planeado, había notado la mirada de Jeon sobre él y eso era algo que no iba desaprovechar en absoluto.
—¿De qué trata el anuncio? —preguntó Jungkook ganándose una risa por parte del menor.
—Ay Kook, sabes que eso no es cierto —respondió— lo de ser el dueño de la empresa sí, pero lo del anuncio es completamente falso, solo quería tenerte para mí un rato.
—Si esto no es una oferta de trabajo realmente no me interesa —intentó irse pero fue detenido por el rubio.
—Sé que quieres esto tanto como yo, no te resistas —dijo poniendo sus brazos en el cuello del pelinegro— pude notar como me mirabas, prácticamente me estabas desnudando con el pensamiento, pero por qué hacerlo de esa manera si puedes hacerlo con tus manos ahora mismo.
—No... no sé de qué hablas —el pelinegro tragó grueso, la faceta descarada de Jimin le volaba la mente.
El rubió sonrió y se alejó un poco quitando sus brazos del cuello de Jungkook, estaba logrando lo que quería solo era cuestión de segundos para que su presa cayera completamente.
—¿No lo sabes? —se arrodilló frente al pelinegro— estoy seguro de que tu amiguito de aquí abajo lo sabe perfectamente si no, no estaría tan duro —tocó el bulto en los pantalones del pelinegro— ¿verdad?
Jungkook tiró su cabeza hacia atrás ante las caricias que el rubio le daba, no quería caer pero ya era muy tarde.
—¿No te importa que tu esposo esté a unos metros de aquí? —dijo haciendo que el rubio se ponga de pie.
—Tú lo has dicho, está a unos metros.
La razón de ambos estaba nublada, así que con las manos entrelazadas buscaron un cuarto desocupado donde ambos pudieran saciar la sed que tenían del otro, aunque hace días hubieran dicho que era la última vez.
ººº
2/2
Buenooo hasta aquí llegué por hoy, bye bye ^^
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MINE // KOOKMIN
FanfictionJimin lleva un año de casado y tras una discusión con su esposo sale de casa en busca de algo de distracción llegando a un club donde conoce a Jungkook, un pelinegro que desde que vio a Jimin entrar a aquel lugar, quedó hipnotizado con su belleza. O...