EL MINISTERIO DEL TIEMPO (ALBAYA)

TIEMPO ANACRÓNICO

Aura había estado en Valencia con su abuela, o la que pensaba era su abuela hasta hacia unos meses, cuando era pequeña. Habían ido por Fallas y su recuerdo de Valencia era el de una ciudad llena de gente, muy distinto de lo que ahora iba observando por la ventanilla del coche de Natalia. Quizás fuera por la hora, pensó, la mayoría de personas trabaja por la mañana y es normal que las ciudades se vean mucho más tranquilas. Y aun así había algo que no terminaba de gustarle y por la cara de su tía no era la única en pensarlo.

—Algo no va bien. —dijo de pronto Natalia— Aquí tendría que haber una plaza de toros y allí un hotel. —Aura miró a su tía sin acabar de comprender a lo que se refería— Creo que los Hijos de Herodoto han hecho cambios en la historia.

—¿Y qué vamos hacer?

—Primero de todo llamar a Capde, después aparcar e investigar un poco. —Marcó el número de Joan Capdevila en el móvil y esperó a que sonara— ¿Joan?

—Dime Natalia.

—Tenemos un problema grave.

—Lo sé.

—¿Lo sabes? —Se hizo un silencio al otro lado— ¿Qué sabes?

—Sé que ha habido cambios en el presente. —Aura y Natalia se miraron— Buscad a Olivia y a Mamen, según mis fuentes seguían en Valencia. Pero id con cuidado, Valencia ya no es la Valencia que conocemos, ahora pertenece a Al-Andalus, de hecho nunca ha dejado de pertenecer a él.

—¿Cómo? —Aura no podía creerlo— Pero si Al-Andalus dejó de existir en...

—1492, con la Toma de Granada. —dijo Natalia— ¿Qué ha pasado Capde?

—Según nuestros informes el intento de golpe en la Santa María fue un señuelo, la misión real se estaba produciendo muchos años antes, impidiendo que las tropas de los Reyes Católicos conquistaran tierras musulmanas.

—No me lo puedo creer... —dijo Aura

—¿Cómo se nos ha podido escapar?

—Desde lo de San Sebastian los movimientos por el tiempo son cada vez más sutiles, nada de bombas o atentados a gran escala, simplemente con asesinar a la persona adecuada en el momento idóneo es suficiente y lo saben. —Capde suspiró al otro lado del teléfono— Estamos trabajando para solucionarlo, pero nos llevará algo de tiempo así que id con cuidad.

—Lo haremos. —Y diciendo esto colgó la llamada.

—Natalia necesito hablar de algo contigo en privado.

—De acuerdo. —dijo cogiendo su teléfono para desconectar el manos libres— Dime.

—Verás, hay algo que debes saber acerca de Olivia...

—Suéltalo ya Capde.

—Mamen no fue solo a protegerla, la reclutó como agente.

—¿CÓMO? —dijo levantando demasiado la voz.

—Después de la experiencia con Aura pensamos que era la mejor opción, su traslado a Madrid estaba previsto justo en el momento en que ambas desaparecieron.

—¡Y me lo dices ahora!

—Con Alba en el hospital y todo...

—No me vengas con chorradas, pudiste avisarme hace días. —Aura miraba a su tía preocupada por lo que fuera que Capde le estuviera contando— Lo primero es salvar a mi hija, luego acabaremos la conversación. —Y dicho esto colgó la llamada golpeando el volante con furia.

—¿Va todo bien?

—No, pero da igual. —Natalia se tapó la cara con las manos y luego miró a Aura— Olivia es agente del Ministerio al parecer.