El vacío de un alma

31.- Fohl ha desbloqueado una nueva fobia: gusanos

Casi una semana antes de que Drake se revelará a la familia Valliere con su verdadera forma...

El peculiar grupo de tres se encontraba tomando asiento alrededor de una fogata, en cierto perímetro alrededor del fuego había un muro hecho con estacas de madera unidas por lianas y cuerdas o pedazos de tela, había unos cuantos sacos de dormir o colchones improvisados hechos con telas, hojas, pieles o incluso telarañas gigantes

Clavados al fuego para cocinarse había unos cuantos palos de madera con carne de algún tipo en ellos

Noah: entonces... Ya han pasado dos días y no hemos encontrado rastros de la celda y acceso al siguiente piso, es más, cada vez tenemos menos tiempo antes de ser enviados de regreso a la entrada *comentó con un suspiro*

Anteriormente Noah y Fohl querían descender todo lo posible por las recompensas y la fuerza que podrían adquirir, ahora tenían una buena razón para llegar al fondo, primero, todas las personas que el overlord podría tener atrapadas allí si aún siguen con vida y segundo pero mas importante, si no lograba llegar al supuesto camino a la entrada que hay allí, Ouzog no sería capaz de salir a la superficie y se quedaría atrapado aquí

Fohl: me temo que no, no hemos logrado encontrar absolutamente ninguna pista y los pocos templos que encontramos solo contenían riquezas o algún arma que ahora mismo no nos sirve *se quejó con un suspiro*

Ouzog: malditos bichos *dijo agregando su centavo mientras mataba algún insecto en su cuello*

No solo se refería a los pequeños sino también a los grandes, la selva es habitada por una gran población de numerosas tribus de orcos y duendes, no veían casi ningún hobgoblin y ya habían casi chocado con cuatro orcos rojos o lo que Ouzog les dijo "orco demonio"

Había algunos otros habitantes en este lugar, primeramente un montón exagerado de slimes venenosos, Noah está seguro de que son ácidos pero esos son detalles, también hay una pequeña población de slimes hechos de magma rondando alrededor de un enorme volcán que no era difícil de perder

Lo más molesto en opinión de todos eran los mosquitos gigantes, los murciélagos cráneo que escupen fuego como un lanzallamas y sobre todo

Las jodidas larvas Tiki, al menos así las llamo un orco que mataron

Eran unos gusanos un poco más grandes que una persona, asomaban sus cabezas desde el suelo y empezaban a escupir bolas de ácidos digestivos desde distancias absurdas, lo mejor era correr esquivando y tomando cobertura porque una vez los alcanzaban la pelea estaba ganada

Pero eran muchos, cómo, ahora mismo podían verlos atravez de una que otra fisura muy pequeña entre las estacas de su muro, ojos verdes brillando en medio de la oscuridad, estaban por todos lados

Además, todo esto era sin contar lo que sea que está rondando por el piso, han escuchado gorgoteos de algo enorme en alguna parte, han sentido la actividad sísmica y han visto a los orcos y goblins correr de regreso a sus guardias en cuanto cae la noche, hay algo más allí con ellos, algo que seguramente estaba más alto en la cadena alimenticia

En cuanto a sus propias fortalezas, Noah ha estado absorbiendo pasivamente la magia que llena el laberinto desde el momento que entró, Fohl ha estado consumiendo pócimas y elixires que han encontrado a lo largo y ancho del laberinto, claro que hasta ahora solo los tenían guardados, Ouzog fue el que les dijo cuál era y cuál no era seguro de consumir, él mismo consumió unos pocos

Noah: mañana a primera hora debemos continuar buscando, a Fohl y a mí nos queda poco tiempo antes de que decidan sacarnos de aquí *mencionó con un suspiro mental*