You'll Be Royalty

Mal presentimiento

P.O.V. Narrador omnisciente 

Unas cuantas semanas han pasado desde que nuestras dos protagonistas comenzaron su relación y adoptaron a su cachorrito, semanas en las que su felicidad y alegría era sumamente notoria... Lastima que eso no pueda durar para siempre ¿Cierto?

Hacía un par de días que habían recargado la tercera y ultima gema de la caja de la calamidad, completando así la misión que a Marcy le habían encargado. La pelinegra sabía que cada vez estaba más cerca de tener que despedirse para siempre de su amada rubia y de su mejor amiga castaña, pues ellas tarde o temprano regresarían a su planeta y a sus normales vidas... Si tan solo la azabache pudiera hacer algo para evitar que eso sucediera, lo haría. Lastima que no puede... ¿O si puede?

La azabache trataba de ignorar este hecho, pero cada vez le era más complicado hacerlo. La alemana y la tailandesa pasaban por lo mismo, ninguna de las dos chicas quería irse y abandonar Amphibia.

Actualmente, todos se encontraban yendo rumbo a Newtopia, pues el rey es el único que sabía como activar la caja. Marcy no sabía completamente como hacerlo, tenía cierta idea de como utilizarla ya que había leído unos cuantos libros sobre ella pero no estaba segura, por eso es que necesitaba la ayuda de su padre.

La azabache y la rubia platicaban de cosas triviales y, en un punto de la conversación, salió a flote el tema del planeta del que venían la oji-azul y la oji-café.

Sasha: No se porque tienes tanta curiosidad en saber más sobre mi mundo, si lo comparas con Amphibia, el planeta Tierra se vuelve súper aburrido. -Comentó la alemana con indiferencia.-

Marcy: ¿Acaso dijiste planeta Tierra? .-Preguntó incrédula, esperaba que simplemente hubiera escuchado mal y que Sasha se refiriera a otro planeta más.-

Sasha: Si. Anne y yo venimos de ahí, el tercer planeta a partir del sol que se encuentra en la galaxia conocida como "Vía láctea". -Explicó con desinterés, a la oji-azul nunca le había llamado la atención ese tema y no le gustaba mucho hablar de eso, le aburría.-

Por su parte, la azabache simplemente no podía creer lo que acababa de escuchar salir de la boca de su novia... El mismo planeta del que vienen Sasha y Anne es el mismo planeta que su padre quiere invadir.

La cabeza de Marcy estaba hecha un lío. Pensaba en como le iba a decir eso a las chicas, no podía llegar simplemente y decirles: "Oh, tengo que comentarles que mi padre quiere invadir su mundo, esclavizarlo y de paso destruirlo".

Sasha se comenzaba a preocupar por la reacción de la azabache, quien había palidecido y no respondía al ser llamada. 

La alemana, en un intento desesperado por hacer reaccionar a Marcy, tomó cuidadosamente de los hombros a la oji-rubí y le dio un cálido beso en los labios. 

Eso hizo que la menor saliera de sus pensamientos, olvidando todo lo que la estaba agobiando. Al procesar lo que había sucedido un gran sonrojo se extendió por toda su cara y poniéndola nerviosa.

Sasha soltó una leve risa al ver como se había puesto su pareja por un simple beso, le encantaba ser ella quien causara eso en la pelinegra.

Anne: Oigan, no coman enfrente de los pobres. -Comentó al ver como las chicas se ponían melosas y cursis la una con la otra.- Me va a dar diabetes de tan solo verlas.

Sasha: Calla Savisa, solamente estas celosa de que yo tengo una novia linda, inteligente y genial, mientras que tu no tienes nada. -Replicó juguetonamente la rubia.-

Anne: Lo que tu digas, Elizabeth .-Dijo en tono burlesco la castaña.-

Marcy: ¿Elizabeth? ¿Tu segundo nombre es Elizabeth?