Ikki Shun Y Hyoga-(EL DUEÑO DE SU CORAZÓN)

CAP 20 (El secreto de Shiryu.)

HYOGA
Faltaban pocos días para ir de nuevo a Siberia, tenía mucho tiempo que no visitaba a mi difunta madre, al parecer todas estas locuras me hicieron perder por completo la cabeza y salir de mi realidad. Aún así mi madre jamás será un olvido para mi.

Era una mañana soleada, pero muy fría, todos seguían dormidos, bueno, casi todos...me dirigí hacia la cocina...

SHUN; buenos días (dijo muy alegre)

HYOGA: buenos días, pequeño conejito (respondía con un cálido beso y apretón de glúteos) ¿Shiryu y Seiya aún siguen dormidos?

SHUN: Ujum (insistió) al parecer pasaron casi toda la noche la noche en el bar. Ni siquiera nos dimos cuenta en que momento llegaron.

HYOGA: deben estar con las copas por encima

SHUN: Es muy probable, decidí hacer hoy el almuerzo para todos.

HYOGA: es un lindo detalle de tu parte...te daré una mano.

SHUN: es muy extraño que tú cocines

HYOGA: no suelo hacerlo muy seguido, solo por tratarse de ti lo hago, mi pequeño. (Sonrisa)

SHUN: soy muy afortunado de tenerte.

HYOGA: pienso lo mismo (respondía mientras le acariciaba la mano) por cierto Shun...hay algo que debo decirte

SHUN: ???...¿qué ocurre? ¿Todo está bien?

HYOGA: claro, es sólo que...en estos días voy a partir para Siberia, tengo que ir a visitar a mi difunta madre y a ver a la gente con la que pase un poco de mi niñez.

SHUN: oh, esta bien, entiendo (dijo con una mirada muy triste) ¿entonces...cuando regresaras?

HYOGA: aún no lo sé, no tengo día de llegada, pero te prometo que estaré bien y que regresare.

SHUN: ...

HYOGA: levanta esa cara, no estés triste, no es una despedida, voy a regresar y volveremos a estar juntos.

SHUN: es lo que más quiero...

Shun se me acercó lentamente, se hizo de puntas para poder alcanzarme y darme un muy apasionado beso, mientras yo lo abrazaba...pero

¡CARAJOO!

SHIRYU: L-Lamentó haber in-interrumpido (respondió muy avergonzado)

HYOGA: O-oye Shiryu...esto...no...Shun y yo...(mierdaaa, se me iban las palabras de la boca, no sabía que decir, se me caía la cara de pena)

SHIRYU: No te preocupes, Hyoga, he visto cosas mucho más fuertes y apasionantes.

HYOGA: ¿cómo? ¿qué has querido decir con eso?, estoy seguro que no es la primera vez qué haces un comentario similar.

SHIRYU: Hyoga, no es la primera vez que los encuentro a ti y a Shun de esa manera

¿Que carajos ha dicho? ¿Que no es la primera vez?

HYOGA: ¿qué dices?

SHIRYU:  (suspiró) anteriormente...ya había visto algo similar, sólo que decidí no molestar con eso, de echo, Shun ya lo sabía

HYOGA: ¿qué? (Dije muy confundido mientras regresaba a ver a Shun) ¿por qué no me habías dicho nada?

SHUN: lo siento, pensaba que quizá ya lo sabrías

SHIRYU: de echo Hyoga ¿recuerdas aquella ocasión cuando yo estaba en la sala tomando aquel café y bajaste desesperadamente preguntando por Shun?...bueno ese día quería aprovechar la oportunidad para decírtelo, pero no se pudo del todo

HYOGA: Shi-Shiryu...

SHIRYU: descuiden chicos, su secreto esta a salvo conmigo, sea como sea somos hermanos, crecimos juntos en esta mansión, eso no cambia nada, aún que a decir verdad, al inicio si se me hacía un poco raro el porque se la pasaban tanto tiempo juntos. Pero ahora todo esta bien.

SHUN: eres una persona muy noble Shiryu, muchísimas gracias (decía mientras una lágrima de alegría corría por sus mejillas).

Después de aquel secreto salido a la luz, siento que me sentiré un poco incómodo al ver a Shiryu, pero no me importaba, era cuestión de dejarlo pasar o acostumbrarse. Soy tan ingenuo que como no me di cuenta antes de que trataba de decírmelo. En fin, estoy feliz de que no tengamos que tener tanto cuidado ahora. Pero si sería sumamente vergonzoso que Shiryu llegara nuevamente a encontrarnos de una manera aún más intensa.

Llego el atardecer, y yo sólo contaba los días que faltaban para emprender mi viaje hacia Siberia, me ponía triste el saber que tendría que alejarme de Shun, lo que significa que...alguien o sea, Ikki, iba aprovechar mi ausencia para conquistar su inocente corazón. No me agrada para nada ese sujeto, sólo lo tolero por tratarse de Shun, es inevitable no querer alejarlo de nosotros.