✧ 𝐌𝐚𝐠𝐢𝐜 𝐒𝐩𝐞𝐥𝐥 ✧ | ʙᴇᴏᴍɢʏᴜ × ᴛxᴛ

𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝟔: 𝐆𝐮𝐬𝐭𝐨 𝐜𝐮𝐥𝐩𝐨𝐬𝐨 ᵗᵃᵉᵍʸᵘ

Narra Taehyun

Últimamente Beomgyu está muy extraño, definitivamente le pasaba algo. Sobretodo se la pasaba con Hueningkai e ignoraba a Yeonjun. Ocurrió algo, pero ni Soobin ni yo nos enteramos.

Y esto afectaba mucho a las dinámicas del grupo y no solo nosotros nos dimos cuenta. Los fans también. Cuando teníamos que vestirnos con los conjuntos preparados por los estilistas él siempre tardaba bastante más.

Hace mucho que no nos quedábamos a solas y eso me ponía triste porque él es mi mejor amigo. Me duele que solo esté con Kai, que sus pocas risas sean provocadas por él y no por mí, que solo lo abrace a él y a mí me dedique sonrisas incómodas. Que cuando quiera hablar con él ponga alguna excusa para irse. Ya no quiero insistir más, ¿hice algo mal?

Veo a un Yeonjun malhumorado y un Soobin preocupado sentados en el sofá, estaban viendo una película chorra de Netflix. El pobre hacía sus intentos como líder de alegrarle. Sin embargo hyung solo estira las comisuras para formar la sonrisa más falsa posible que apenas duraba unos segundos para volver a poner esa expresión mustia.

—Ay, ya dime Yeonjun. ¿Qué pasa?

—Se trata de Beomgyu, es obvio. ¿No te acuerdas como me gritó el otro día?

—¿Hiciste algo? — Esas palabras no parecieron gustarle mucho al peliazul.

—¿¡Cómo que si hice algo?! ¿¡Por qué tuve que hacer algo?! ¡¡Estábamos bien, resolviendo lo otro cuando le dije un cumplido y se puso como histérico!!

—A saber qué le habrás dicho esta vez —comentó—. Cada vez que abres la boca la cagas.

—Quién sabe y tal vez sí, pero...

—¿Puedo preguntar qué pasó exactamente? —me introduje a la conversación.

—Será mejor que no...

—¿Cómo que no, si soy su mejor amigo?

—No tienes ni idea de nada, Taehyun. Limítate a callar. Si Beomgyu no quiere hablar con nadie es cosa suya.

—Pues será por la cosa tan bonita que le dijiste de que le sentó bien estar en el hospital —dije ya calentito.

—¿Perdona? — Dejó el bol de palomitas en la mesilla de al lado y se fue acercando a mí.  Me sacaba mínimo media cabeza, maldije el día que dejé de crecer y terminé siendo el más bajito del grupo.

—Oye Yeonjun, cálmate —llamó Soobin, pero el mencionado hizo caso omiso.

—Te estás llevando una paliza —avisó.

—¡No es mi culpa que Beomgyu te evite! ¡Déjame en paz! —le grité hasta que se fue, seguramente a llorar ya que se le empezaba a quebrar la voz.

Realmente estaba loco, tenía los sentimientos a flor de piel. Definitivamente pasó algo gordo. Pero ni él ni Beomgyu querían contarlo.

Me encontré a mi único menor sirviéndose un refresco de la nevera y aproveché para preguntarle por él.

—Hey Huening, ¿dónde está Beom?

—Oh, está en la ducha.

—Está bien, iré yo también.

Cuando me dirigía al cuarto de baño noté algo detenerme y agarrar mi muñeca.

—Ni se te ocurra —dijo con un tono serio como pocas veces le había visto, sus ojos se clavaban en los míos.

—V-vale...

Decidí ir a echarme una siesta, todo era un maldito fastidio. Fui a mi cuarto y me dejo caer en mi propia cama, maldita sea Beomgyu. Quiero que me vuelva a hablar. Y...