*CAPITULO 11*

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- Muy bien, pequeños novatos. -graznó un señor de mediana edad. Era calvo, corpulento, y demasiado alto para ser considerado humano. Casi cuatro metros. Una cicatriz horrenda recorría toda su cara desde la parte media de su calva hasta su barbilla, pasando peligrosamente por su milagroso ojo derecho aun funcional hasta llegar hacia su barbilla, pasando en medio de sus labios. Se trataba del instructor de la academia de primer año, asignado por el mismo director. Sus músculos se flexionaban fuertemente mientras caminaba de un lado a otro cual un soldado en jefe a sus cadetes.

De pie en una fila como cadete, izuku se encontraba prestando atención a su primer día de clases. Estaba entre los primeros de la fila, de los treinta jóvenes y era el más joven de todos. Además, la princesa del reino de los elfos no paraba de observarlo entre miradas ocasionales a escondidas del instructor.

Los viejos, pero ahora rejuvenecidas intuiciones de izuku le decían que el comportamiento de la princesa no era normal.

- Presten atención. - el instructor a cargo de la clase exclamó. – mi nombres es herduin, hijo del general tolquin, nieto de tormin, descendiente de la linea de sangre del mikou drako. Pertenezco a la casa paladium, fuertes defensores del reino de ashura. – el instructor gritó con orgullo, sorprendiendo a los presentes. Los susurros empezaron a intensificarse, los chicos sorprendidos de ser enseñados por la elite del reino. – la razón del porqué deje mi valioso tiempo al estar al frente de las tropas de la casa paladium y venir aquí para ser su niñera se debe a una petición de la casa real, quien había acudido a la petición del director almerak. Hoy, entre nosotros, un mikou se registra luego de 300 años desde la muerte del legendario caballero drako, quien se enfrentó al mismísimo dios dragón. – el maestro, herduin, explicaba con severidad. Este fijó su vista hacia izuku, dejando al chico con la suficiente suposición para deducir quienes estaban al tanto de su existencia.

- Así que sin rodeos, Comencemos con la primera clase con una lección. El conocimiento básico del touki. – herduin finalizó. Rápidamente se hiso a un lado y mostró una piedra que se encontraba detrás de él.

Tomó la espada que se encontraba en su cintura y desplegó un haz de velocidad con su espada. Había hecho un corte limpio en la piedra que parecía ser relativamente dura.

Habiendo hecho tal demostración de habilidad, empezó a dar una pequeña explicación de lo que había hecho.

- No se necesita ser un erudito para deducir que fue lo que paso aquí. - Herduin envainó su espada, acercándose a la piedra dividida. Alejando una parte de su otra mitad, los chicos pudieron presenciar con asombro el resultado de la fuerza descomunal del maestro herduin. – todo lo que pasó aquí se trató de nada más ni nada menos que de magia. Magia pura, y muy potente. No se sabe exactamente cómo funciona la magia al interactuar con el cuerpo en vez de ser de manera externa, como usualmente es utilizada por los magos. Pero lo que si se sabe es que la magia actúa según los deseos de la persona. En el caso de un guerrero, aumenta el poder de pelea del guerrero a la hora de la batalla. Tampoco se sabe acerca del funcionamiento de la magia en el cuerpo a la hora de la batalla, pero se puede invocar para los momentos de necesidad. Touki es eso. El poder interno de la magia en un guerrero. Si un caballero es incapaz de invocar magia interna a la hora de la lucha entonces ese caballero no tendrá valor militar y será peso muerto. Por eso empezaré a probarlos a cada uno. Realizaran actividades forzosos donde será esencial el touki y luego trabajaremos desde esa base. – herduin explicó.

Mirando a una persona en específico, decidió empezar con el como ejemplo.

- Tu allí, niño mikou. Ven aquí. – herduin llamó. Izuku rápidamente caminó hacia herduin, mirando a sus compañeros una vez estuvo al lado de su maestro.

¡¡LA SEGUNDA VIDA DE UN HEROE RETIRADO!! (izuku en mushoku tensei).Donde viven las historias. Descúbrelo ahora