-16-

562 47 20
                                    


     - Mira, hijo de puta, no se quien  coño seas, pero... ¡Sueltame ya!. -Grito Kaigaku enojado viendo a la persona, la cual, lo habia secuestrado.

Luego de haber salido de la casa, después de haber tenido esa pequeña pelea con Kokushibo, camino en dirección a la casa de su abuelo, pero repentinamente unos hombres vestidos de negro lo emboscaron y lo secuestraron. Ahora se encontraba amarrado a una silla, no podia moverse, tenía sus piernas sujetas con una cuerda al igual que sus  brazos en una silla, desde su labio se deslizaba un poco de sangre, la cual, llegaba hasta su barbilla.

- Querido, no te soltaré hasta que tenga a Tsugikuni frente a mi. -Dijo aquella persona con una sonrisa observando a Kaigaku.

- ¿Que mierda tiene que ver el idiota ese?. Me importa un carajo, ¡A mi no me metas en lo que el imbécil ese hace o no!. -Dijo más que enojado frunciendo el ceño, aquella persona rió por lo bajo.

- ¿De esa manera tratas a tu esposo?. -Preguntó curiosos.

- Tsk... Ni siquiera se si sigue siendo mi esposo. -Bajo la cabeza desanimado.

- Aw, no te pongas sentimental, querido. No me gustaria verte triste. -Acarició el cabello de Kaigaku, pero este se alejó ante tal acto- Ahora, hay que esperar que Tsugikuni venga por ti. -Pincho la nariz de Kaigaku mientras este lo fulminaba con la mirada.

Kaigaku seguia ahi, amarrado a esa silla, le habían dado un poco de agua, y no se negó a recibirla tenía una sed e horrores. Suspiro cansado, valla mierda, todo por culpa del amor que le tenía a Kokushibo era que estaba aquí, por cómo ese hombre loco le robo el corazon. Todos aquellos que iban tras Kokushibo, ahora irian tras Kaigaku, ya que como era "la esposa" de Kokushibo, les seria mas facil ir tras él y llegar más fácil hacia Kokushibo. El sueño le estaba ganando al pobre Kaigaku y sin aviso alguno se quedó dormido.

Kokushibo caminaba de un lado a otro en su oficina, todos en la empresa estaban preocupados por el comportamiento de su jefe después de haber recibido una llamada. Enojado, golpeo el escritorio, frente a él ya hacían sus amigos y los ancianos de la mafia.

- ¿Como que han secuestrado a Kaigaku?. -Pregunto Muzan viendo a seriamente a Kokushibo.

- Hace nada recibí una llamada, no se quien coño es, pero me dijo que secuestró a Kaigaku. ¡Ahora los hijos de puta no pueden venir directamente hacia mí sino que ahora van tras Kaigaku!. -Grito enojado.

- Te lo advierto, mas bien, te lo advertimos todos, mas te vale que no le suceda nada malo a Kaigaku, por que date por muerto. -Le amenazó, Kokushibo se levantó de su lugar y agarró su saco.

- ¿Me ayudaran a ir por mi esposo?. -Pregunto, Muzan asintió y se levantó observando a Kokushibo.

- Vamos tras el imbécil que se llevó a Kaigaku. -Se dieron un apretón de manos.

Salieron del lugar, a Kokushibo le habían dicho dónde era que se encontraba Kaigaku y se dirigieron ahí. Kaigaku tosio mientras sacudia su cabeza, maldijo a aquellas personas por haberle lanzado aquel balde de agua fria encima, jadeo e inclinó hacia atrás la cabeza, [" Maldita sea. Debo buscar una manera de salir de aquí. "], pensó mientras veía las gotas de agua caer de su cabello deslizándose por su rostro y otras cayendo en su ropa mojada. Aquellas personas rieron al ver a Kaigaku, frunció más el ceño, y se fueron dejándole solo. De pronto recordó que en su bolsillo derecho llevaba una pequeña navaja, se dio una cachetada mentalmente por no recordar eso. Con mucha dificultad pudo sacar la navaja de su bolsillo, observó que nadie viniera y intento cortar la cuerda que lo sujetaba a esa silla, fue dificil, pero logro soltarse, suspiro con una sonrisa en sus labios y cortó el otro pedazo de cuerda para seguir con las que sujetaban sus piernas.

Obssesive. [EN EDICIÓN].「KᴏᴋᴜKᴀɪ」Donde viven las historias. Descúbrelo ahora