── fanzoned !

¡ doce !

Minho caminaba nervioso hacia la misma cafetería en donde habían quedado la última vez, sintiéndose culpable por lo que estaba a punto de hacer; pero él aún podía cambiar de opinión, podía elegir no hacerlo y que esa fuera una salida como las demás.

Sin embargo, no iba a hacerlo, y aunque comenzaba a dudar sobre sus sentimientos hacia Jeongin no podía aceptarlo, porque si lo hiciera, eso significaría tener que dejar todo por él, y Minho no se sentía preparado para hacer algo así por alguien. Puede que, dentro de su corazón aún existiera algo de egoísmo, pero, ¿estaba mal no querer arriesgarlo todo?

Quiso regresar, pero al ver a Jeongin parado frente al pequeño edificio no pudo, sería aún peor dejarlo ahí esperando sin darle una explicación.

Suspiró, pensando una vez más si realmente sería una buena idea, aceptando que probablemente dejarían de hablar durante un tiempo si no llegaba a salir bien. No quería perderlo, pero tal vez era necesario, por el bien de ambos.

— Hey —Jeongin le miró con una sonrisa, igual que siempre—. Viniste.

— Claro, no podía dejarte solo.

Tal vez, Minho ya no quería seguir con eso.

— Vamos adentro.

Lee abrió la puerta y Jeongin entró primero, corriendo hacia la primera mesa desocupada que vió, casi al fondo del lugar.

— ¿Sobre qué querías hablar?

Yang se veía tan emocionado, que Minho sintió que no podría decirlo, y eso era realmente malo.

— Sobre nosotros —contestó, sintiendo como sus nervios aumentaban con el pasar de los segundos—. Quiero decir, ¿realmente te gusto?

— Sabes que sí, Min —el mayor hizo una mueca, pensando en cómo continuar sin sentirse culpable—. ¿A qué viene esa pregunta?

Realmente no quería tener que decirlo, pero ahora no había vuelta atrás.

— No debería ser así, Jeongin.

— ¿Por qué? —Minho sólo negó, no queriendo contestar a esa pregunta— ¿Acaso yo no te gusto?

Él realmente no lo sabía, sus sentimientos eran demasiado confusos en ese momento, lo habían sido desde que lo conoció, pero no es algo que pudiera decirle.

— No. Digo, tal vez sólo crees que te gusto porque soy tu ídolo, fácilmente podrías confundir esos sentimientos, ¿sabes? —Jeongin negó, él estaba más que seguro de sus sentimientos por Minho y le molestaba un poco el hecho de que no lo tomara en serio— Somos amigos, Jeongin, podrías confundir ese cariño con algo más.

— No, estoy completamente seguro de lo que siento por ti —afirmó, aún viendo a Lee, quien comenzaba a jugar con sus manos al no saber qué hacer—. Tal vez antes sólo me gustaras porque sí, eres mi ídolo, pero luego de conocerte mejor me di cuenta de que no sólo es eso, incluso me atrevería a decir que estoy enamorado, así que no hables como si lo supieras todo.

Minho sabía que, tal vez, no fue la mejor manera de decirlo, así como tampoco estuvo del todo bien haberlo dicho en cuanto entraron, quizás debió esperar un poco más, porque ahora Jeongin no parecía querer seguir allí.

— De todos modos, ¿por qué me estas diciendo todo esto?

— No lo sé, creo que sólo estoy confundido —contestó, sintiéndose aún peor al no saber qué decir.

— ¿Confundido? —repitió.

— Es lo que dije —suspiró nuevamente, buscando las palabras adecuadas para continuar—. Ahora mismo, realmente no sé qué es lo que siento por ti, y creo que sería bueno tomarnos un tiempo hasta que pueda descubrirlo.

Jeongin negó, levantándose de su asiento.— No creo poder esperarte más, Minho.

— No te pedí que lo hicieras —volvió a decir—. Tampoco quiero que me busques, ¿sí? Realmente necesito pensar bien las cosas, y contigo cerca no creo poder hacerlo.

— Bien, pero no esperes gustarme por siempre, en algún momento llegará alguien más —tomó la bufanda que había colgado en la silla hace un rato, volteando para poder irse—. Espero que puedas resolverlo pronto.

Minho sólo lo dejo ir, entendía que estuviera molesto con él después de todos sus intentos por llamar su atención para que finalmente terminara de esa manera, no lo culpaba.

Y ahora también esperaba poder descubrirlo pronto, porque conociendo a Jeongin, sabía que él no mentía al decir aquello, y Minho realmente no quería verlo con alguien más.

Debía tomar una decisión si no quería perderlo por completo.