¿Hey Matías vas a jugar o no? - me dijo Víctor al verme pensativo antes de el torneo -
La verdad sí quiero jugar pero no sé, no me siento muy bien - le respondí -
¿Es por ella cierto, cuánto va una semana desde que ella volvió? - preguntó -
Sí hace una semana desde que hable con ella, pero todo es tan confuso... Aún creo que duele y la verdad no sé qué hacer - respondí algo desalentando -
Te entiendo amigo pero ¿stás seguro de que puedes jugar? - preguntó nuevamente, mientras añadía - si no puedes jugar tranquilo no pasa nada igual ya nos has ayudado demasiado...
Sí bueno, estoy mal pero tranquilo creo que sí podré jugar, solamente necesito concentrarme el doble y no pensar en ella - digo mientras se me escapa un suspiro -
Bueno, mira está bien, jugaras pero si no te sientes muy bien puedes decirnos y no hay problemas, sabemos que es difícil jugar con la mente así - me dice mientras se coloca los zapatos -
Tranquilo Víctor, jugaré y ganaremos - le digo al levantarme - ya nos veo representando a la USB.
Así se habla Matías - dijo Diego mientras se colocaba en el medio de todos - bueno muchachos, hoy saldremos allá y les demostraremos que somos los más aptos para representar a esta universidad.
¡Así es! - gritamos todos -
¡Matías! - me grita Verónica desde lo lejos -
Vero, ¿Cómo estás? Pensé que estarías ocupada hoy - le digo al acercarme -
Lo estaba, me volé solo para verte jugar, ya sabes para apoyarte a ti y al equipo.
Gracias, la verdad si necesitamos apoyo, espero podamos ganar.
Sé que lo harán - me dice mientras sonríe -
Gracias - le digo agarrándole una mano - debo irme, ya casi empezamos.
Dale, ¡Tu puedes papi!
Gracias - le digo mientras voy corriendo a la cancha -
El partido comenzó y en a penas 4 minutos ya íbamos perdiendo 2 - 0... Los muchachos estaban tristes pero aún así seguían diciendo que me entendían y asentía... Sé que la culpa era mía, no podía despejar mi mente y no pude anticipar ninguno de los primeros dos disparos... El tiempo corría, ya iban 35 minutos y estábamos 3 - 0 de no ser por los defensas de seguro hubieran más goles, vi la cara de decepción de mis compañeros.
*En el descanso*
¡Matías! - me llama Verónica - ¿Tienes algo?
Tranquila, estoy bien, no pasa nada...
No me engañas, sé que te sucede algo - me dice mientras me agarra la cara -
Tranquila, no es para tanto...
Bueno, está bien, no me digas, pero quiero que sepas algo, no hay nadie como tú, eres grandioso, y sé que eres más que esto... Más que todo esto, no sé lo que tienes, pero puedes superarlo, confío en ti...Gracias preciosa - le digo mientras le sonrío débilmente - intentaré dar lo mejor.
No lo intentes, hazlo, sé que puedes amor.
¿Amor? - le pregunto confundido -
Jajajaja sí, eres mi amor, aunque a escondidas y no oficial.
Jajaja entiendo, ¿Un beso?
No... Sabes que esto debe ser oculto.
Cierto, de todas formas, quiero que sepas que te amo...
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Aquello Que Oculta El Dolor
HumorTras ser decepcionado varias veces, Matias un chico promedio decide darle un cambio a su vida y empieza a actuar bajo su propio criterio, convirtiéndose en alguien hasta él mismo desconoce pero lo hace sentir bien en ocasiones... Paralelamente Andre...