[Esconcer] One Shots

¿Enemies or lovers?

El sonido de tacones retumbaba en el cerámico, o como Cáncer les decía, los tacones de la muerte.

La puerta de su oficina se abrió y visualizo ese cabello largo y la sonrisa de superioridad que tanto odiaba.

—Cáncer.

—Buenos días Acuario.— fingió amabilidad — ¿Qué te trae por mí oficina?

—Soy tu jefa ¿Acaso no puedo venir a ver como va el trabajo?

Ambas sabían que ese no era el motivo de su visita, por lo que Cáncer rodo los ojos e hizo a un lado un par de documentos.

—¿Qué hice ahora?

—La pregunta correcta es ¿Qué no hiciste?

Su superior se quedó mirándola fijamente, en lo que ella pensaba cuál era el problema.
¿Qué no había hecho?

Cuando lo descubrió, una sola palabra salió de su boca: —Mierda.

—Exacto, Cáncer, mierda.

—Te juro que me iba a poner en contacto con él, es solo que, se me olvidó...

— ¿Se te olvido? Ese contrato era de cuatro millones de dolares.

—Lo sé, Acuario, lo siento. Pero no puedes culparme, soy una de las mejores abogadas de la ciudad, y si es que no la mejor. Tenía más trabajo que hacer.

La mujer camino por la oficina, observando todo a su alrededor —Justamente porque eres la mejor no te despido en este mismo momento.

—Muchas gracias,— soltó un suspiro —Te lo recompensaré.

—Claro que lo harás.

Acuario dejo caer un expediente sobre el escritorio de la chica.

—¿Qué es...

—Un caso gratis, ya sabes como funciona, no te pagaran por esto.

La peor pesadilla de Cáncer se hizo presente. Odiaba los casos gratis, era algo demasiado bajo para ella. Su nivel era muy superior para hacer eso.

Contuvo las ganas de gritar y se obligó a sonreír —¿De que se trata?

—Algo simple. Un joven, más o menos de tu edad, que quiere la custodia de su hijo, nada que no puedas resolver.

—¿Un caso familiar? ¿Es una broma, no?

—Si quieres conservar tu trabajo, solo hazlo.

Acuario giró sobre sus pies y salió con sus típicos aires de jefa malvada.

[...]

La noche iba a ser muy larga para Cáncer.
Debía leer todos los documentos que pudiera sobre juicios por custodia para acabar con esto rápido.

Ya había acabado con tres cajas de documentos de la zona de investigación, pero su lectura fue interrumpida por la aparición de alguien tanto molesto como odioso.

—Vaya, vaya, vaya. Mira a quien tenemos aquí.

—Wow, dijiste tres vaya, encerio estas con ganas de fastidiar.

Con una sonrisita, el hombre cerró la puerta y se adentro en el lugar.

—Así que... ¿Un caso gratis?

—¿Quién te dijo?

—Libra.

—Típico.– susurro Cáncer —Y lo primero que hiciste fue venir a molestarme. A veces eres tan infantil Escorpio.