|2| No puedo apartar los ojos de ti ✔

Capítulo 386: Algunos sondeos

Todos en la familia Liang tenían plena fe en las habilidades médicas de Jiang Yao, ya que tanto el coronel Lin como Lu Xingzhi habían sobrevivido con efectos secundarios mínimos. Se sintieron aliviados al escuchar la seguridad de Jiang Yao de que a Lu Xingzhi le estaba yendo bien.

Sin embargo, Lu Xingzhi estaba desconcertado, ¿cuándo revisó Jiang Yao sus heridas?

Sin embargo, sabía que ella no era el tipo de persona que da respuestas a medias. Tal vez lo comprobó antes de que se despertara. Debe ser eso.

Además, Jiang Yao era estudiante de medicina, era perfectamente normal que supiera un poco más sobre el cuerpo humano.

Pero...

Lu Xingzhi de repente recordó algo que seguía olvidando después de despertarse.

Si su memoria le sirvió bien, cuando estaba en la sala de operaciones, Jiang Yao insistió en realizarle la cirugía después de que todos los médicos se rindieran.

Recordó haber tratado de persuadir a Jiang Yao de lo contrario, pero no pudo atravesar su grueso cráneo. Administrado con anestesia, lo siguiente que recordó fue despertarse con la hermosa vista en la habitación.

Entonces, ¿su amada esposa realizó su cirugía? ¿Salvarlo después de que todos los médicos le dieran el veredicto de muerte?

Fue en este momento que Lu Xingzhi se dio cuenta de que Jiang Yao tenía un secreto que llevaba consigo, tan escondido que él no sabía nada.

Sin embargo, sabía que no era el mejor momento para buscar respuestas.

Lu Xingzhi habló con el viejo general Liang y el resto por un rato antes de instarles a que se fueran. Se estaba cansando y quería pasar un rato hablando con su esposa.

Cuando Jiang Yao regresó después de despedir a los visitantes, vio a Lu Xingzhi luchando por sentarse en su cama. Ella gritó: "¿Qué estás haciendo? ¡Acuéstate!"

Lu Xingzhi levantó las cejas y miró a Jiang Yao. Bueno, su deseo fue su orden, se deslizó de nuevo en la cama.

"Querida, escuché que la pierna del coronel Lin sanaría en tres meses, ¿qué dijo exactamente el médico?" Lu Xingzhi palmeó el espacio vacío en su cama, indicándole a Jiang Yao que se sentara. "Tienes que decirme qué está pasando con la pierna del coronel Lin. Mientras esperaba el helicóptero, recuerdo que la Cruz Roja dijo que lo más probable era que le tuvieran que amputar la pierna para salvarle la vida".

Jiang Yao se sentó y miró a Lu Xingzhi en silencio. Parecía estar preocupado por las heridas del coronel Lin con sus incesantes preguntas.

Sin embargo, Jiang Yao era una dama brillante, podía escuchar las palabras entre líneas. Lu Xingzhi estaba tratando de sondear y ver qué tan bien entendía las heridas del Coronel Lin, para entender si ella estaba involucrada en su operación.

Si tuviera que explicar con confianza y en detalle las lesiones del coronel Lin usando varias jergas médicas de uso frecuente, Lu Xingzhi sabría con seguridad que ella estuvo involucrada en la operación.

Hablando francamente, Jiang Yao no tenía intención de ocultar el hecho de que ella sola completó la cirugía del Coronel Lin de Lu Xingzhi.