Y aquí me encuentro recordando con nostalgia ese día tan traumante para mi en su tiempo, una niña de 11 años que acababa de perder a su mejor amiga.
Hoy te pude ver en varios momentos de mi día, pero sobre todo en el atardecer, estabas tan presente como nunca. Me di cuenta que aunque ya no duelas mucho te sigo extrañando.
Y me sigo preguntando que hubiera pasado si te hubiera abrazado más fuerte la última vez que te vi
Me hubiese gustado que me vieras crecer más, que supieras que me esta yendo bien dentro de lo que cabe, se que sigues conmigo.
Y permiteme extrañarte hoy al menos con esta excusa.
Eras, eres y serás mi persona especial, mi hogar seguro y se que aunque no estés aquí como persona físicamente estás ahí como todo lo que me rodea y que siempre estás ahí viendo.
Se que me han pasado muchas cosas recientemente y muero por poderte contar de persona a persona pero esto es imposible... Pero confío que estarás ahí a través de la luna atenta a todo lo que yo tenga que contarte y no llorare porque ni un millón de lagrimas harán que regrese y lo sé porque las llore
Así que me despido, no por siempre por que no puedo continuar sin ti, no por hoy porque se que volveré como cada noche a tu, pero si por este instante para apreciar como estas aquí...
Donde sea que estés cuidame siempre.
