Encadenada a tu piel

15

Jungkook regresó y la rutina volvió. No me gusta mentir pero no quiero que sepa aún de lo que hice con su amigo.

Había jurado en el tribunal que nada de mentiras cuando nos casamos pero aún no era tiempo para decirle; confesaré lo que paso entre los dos.

Aquí está tu desayunó - le serví

Dejé con cuidado el plato con comida y tome asiento con él, el tenía la mirada en su teléfono y solo asintió su cabeza pero antes que diera el primer bocado de mi desayunó el se levantó de la silla.

Jungkook.- Lo siento cariño pero tengo que ir a la empresa - se disculpó y beso mi cabeza - Llegaré a la hora de la comida

Tomó su abrigó y salió de la casa, miré el plató y solo agaché mi cabeza. Desde qué llegó del viaje ha estado más ocupado que de costumbre y algo debe esconder que desde que llegó estuvo raro.

¿Tendrá a otra mujer? - pregunté al aire

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Jungkook

Jimin.- ¿Todo bien? - me preguntó mientras abría la puerta

Si - respondí rápidamente - Lo siento si te llamé de manera apresurada amigo

Tomó asiento en el asiento en frente a mi escritorio.

Jimin.- Tranquilo - respondió despreocupado - ¿Cómo te fue en el viaje?

Pues al parecer saldrá bien en unas semanas - suspiré cansado - ¿Y a ti?

Jimin.- Bien - respondió

Gracias por cuidarla - le agradecí - No quería que se quedará sola y que esos infelices estén afuera

Jimin.- Hice lo que me pediste y un amigo se está encargando de ello - dijo tranquilo - Esperó que tenga alguna información en una semana y media

Gracias - agradecí - Déjame pagarte esto

Saqué de mi cajón de mi escritorio mi chequera y una pluma para escribir la cantidad que le daría a mi amigo.

Jimin.- No es necesario - negó

Proteges a mi esposa es lo menos que puedo hacer Jimin - lo miré a los ojos -  Confío plenamente en ti

El me miró fijamente y al terminar de escribir le entregué el papel. Suspiró y guardo el chequé en uno de sus bolsillos.

Te quería pedir un favor - le dije - ¿Crees poder recoger esto y dejarlo una hora antes de que llegue a la casa?

Ahora le entregué otra hoja con mis datos y el leyó cada palabras y al terminar de leer su mirada se posó en mi, me sonroje un poco.

Es una sorpresa para ella - sonreí - Se acerca nuestro aniversario y quiero llenarla de estos detalles que a ella le gusta

Jimin.- Claro - asintió - Por mi amigo lo que sea

Gracias - sonreí emocionado - Ya está listo, solo debes recogerlo nada más

Se levantó de su asiento y salió de mi oficina.

Jimin

Abrí la puerta de mi auto con cuidado y miré a los lados y no había ningún otro automóvil estacionado en la florería. Miré en la hoja el nombre del local y rectifique.

Es aquí - dije

Comencé a caminar al local y cuando abrí la puerta miré muchas flores de diferentes colores, tamaños y olores. Incluso hay arreglos florales y demás cosas. 

¿Jimin? - escuché una voz femenina hablarme

Giré lentamente y ví a Sana mirarme sorprendida.

Sana - hablé

Sana.- ¿Cómo sabes que trabajó aquí? - preguntó sorprendida

Tranquila - sonreí un poco - No sabía que trabajabas aquí

Ella usaba un delantal color café con pequeñas flores en ella, sostenía una maceta con una flor y me acerqué a ella.

¿Pesa mucho? - le pregunté

Sana.- No - negó tranquila - ¿Vienes a hacer un pedido?

En realidad no - negué - Vengo por un pedido de mi amigo

Sana.- Sígueme - sonrió

Ella caminaba y yo iba detrás de ella siguiendo sus pasos. Al llegar a su lugar de trabajo miré que ella se encarga en arreglar con listones las flores.

¿Esto es lo que haces? - puse mis manos en la vitrina de vidrio

Sana.- ¿Te gusta? - me preguntó

Me gusta - asentí - Lo haces increíble

Sana.- Sabes que otra cosa hago increíble - me guiñó y negué divertido - Vamos

Aquí no por favor - reí

Sana.- Dame la nota - extendió su mano y le entregué la hoja - Oh este hombre hizo un gran pedido

Es lo que ví cuando leí - dije serio

Sana.- Su esposa estará feliz por el detalle que hizo - sonrió emocionada

No me gustaban esas palabras, me molesta demasiado. Pero antes de que fuera por el pedido una de sus compañeras le pidió algo y ella aceptó rápidamente.

Sana.- Lo siento - se disculpó - Si no le ayudó mi jefa se enojará

¿Quieres que te ayude? - la miré - Sabes que soy más alto que tú

Sana.- Te lo agradecería mucho - se acercó y beso mi mejilla - Te daré té de menta