CAP.5 El principio del fin

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Perspectiva de Sol:

Y por fin, después de 12 largas horas llegué a mi destino, Madrid. Estaba muy cansada, nunca había hecho un viaje tan pesado, pero valió la pena, porque a partir de ese instante iba a empezar mi nueva vida.

Me había pasado todo el viaje sin mi teléfono, sin avisar a nadie, aparte de mis padres, de mi repentina huida. Sé que al final la gente se acabaría enterando, pero nunca me imaginé que fuera todo tan rápido.

Al abrir mi teléfono lo primero que me salieron fueron 15 llamadas perdidas y 47 mensajes de Rodri. Entre ellos, leí algunos que decían:

 "Sol, no sabes cuánto me arrepiento", "Martina no es quien tu crees que es", "¿Cómo que te vas a España?", "Vuelve porfavor"...

Si algo tenía claro era que "Vida nueva, gente nueva", y no podía empezar mi nueva vida con mi ex novio llenándome el móvil a mensajes llenos de falsos perdones. Así que decidí bloquearlo, de esa manera seguro que no volvería a molestarme.

Mientras borraba su contacto ví una silueta a lo lejos que me hacía señales con la mano para que la reconociera, al enfocar la vista ví que esa silueta pertenecía a la de mi amiga Sira.

- ¡Sira! - Exclamé emocionada de ver a mi amiga de la infancia de nuevo.

- ¡Sol! ¿Cómo ha ido el viaje? - Me respondió

- Bueno, bastante largo la verdad.

- Entonces espero que no estés muy cansada, por que mi padre te espera en sus oficinas en 15 minutos

- Estoy muy nerviosa Sira

- Tranquila, todo el mundo sabe lo duro que trabajas, todo irá bien.

Me subí al coche de Sira y nos dirigimos a las Rozas a ver a Luis Enrique, el entrenador de la selección Española, para que me explicase todo lo que tenía que saber.

Una vez llegué allí, un hombre del personal de seguridad me condujo hasta el despacho del seleccionador, era un bonito despacho blanco con fotos, mencione i premios que había obtenido la selección a través de los años.

- ¡Sol! Bienvenida a España, has tenido un buen viaje? - Me dijo extendiéndome la mano.

- Si, estoy muy contenta de poder estar aquí y trabajar para la selección Española. - Contesté

- Bien, empecemos por lo básico, como sabes de aquí poco se disputará el Mundial de Qatar 2022...

- Sí, obviamente lo sé.

- Eso significa que no solamente ejercerás como fisioterapeuta aquí en las Rozas si no que nos tendrás que acompañar en nuestro viaje al Mundial.

- Sí, sí lo sé y no hay ningún problema en absoluto

- Muy bien Sol, en una hora llegarán todos los jugadores, y haremos las presentaciones pertinentes, mientras tanto...

La puerta se abrió rápidamente sin dejar que Luis Enrique pudiera acabar su frase.

Detrás de ella apareció un chico alto y moreno que llevaba el chándal de la selección... ¿De que me sonaba?

- Uy, no sabía que interrumpía algo, pero necesito hablar contigo urgentemente - Dijo el chico misterioso con una sonrisa en la cara.

Que chico más maleducado... ¿No ve que hay gente que está reunida dentro del despacho?

- Pedri, no puede esperar a más tarde? Estamos solucionando un asunto

- Es urgente, tiene que ser ahora - Le respondió el chico.

- En ese caso... Sol, el personal de seguridad te dirigirá a tu oficina, dónde tratarás y recibirás a tus pacientes, yo voy a atender este asunto que parece ser de "Máxima emergencia", nos vemos en una hora en el campo para empezar las presentaciones.

- No te preocupes, nos vemos en una hora. - Le respondí

Se dirigieron los dos hacia fuera, pero antes de cruzar la puerta el chico misterioso se detuvo enfrente de mí.

- Muchas gracias guapa - Dijo guiñandome un ojo.

¿Pero que se había pensado? ¿Me interrumpe la reunión y me guiña un ojo? ¿Cómo se puede ser tan cara dura?

Me giré para ponerle una cara de desaprobación, pero él me continuaba mirando con esa sonrisa burlona.

No sabía quien era ese chico, pero esperaba no tener que cruzarlo nunca más.

Bajo el foco del estadioWhere stories live. Discover now