TR3SCIENT0S AÑ0S SIN V3R AL INM0RTAL (ESPAÑOL)

CAP. 1 - DEMONIO.

不見上限三百年

ARCO 1: DOMINIO NORTE DE CANGLANG.

CAPÍTULO 1: DEMONIO.

Durante los años de Tianshu, hubo fuertes nevadas en Mianzhou. 

La nieve envolvió el Mar Ilimitado durante kilómetros, llegando hasta el Territorio del Norte de Canglang.

***

Estaba tan frío que sobre el agua estancada se formó una fina capa hielo.

Wu Xingxue se paró sobre un árbol marchito en medio del agua, lavándose la sangre de las manos.

Sus manos eran delgadas y pálidas, sin una pizca de vivacidad. Parecía como si acabara de molestar a los pájaros de un palacio yao[1], como si acabara de jugar con las flores de la Capital Inmortal. Pero no hace mucho, esos dedos habían arrancado sin escrúpulos varias cabezas.

Así que se lavó con cuidado, sin ninguna intención de hablar, y los que esperaban en la orilla también tenían miedo de hablar. Después de contener la respiración durante un largo período de tiempo, finalmente se les ofreció una sola oración.

— ¿Qué año es? — preguntó Wu Xingxue.

Su voz penetró a través de la vasta superficie del agua, un poco confusa.

La gente de la tienda se tomó un momento para reaccionar y luego dijo apresuradamente — El vigésimo quinto año de Tianshu.

Wu Xingxue olió sus dedos lavados y finalmente miró — ¿Tianshu?

— Sí, Tianshu.

— Tianshu... — Wu Xingxue repitió ligeramente este nombre desconocido.

La persona que respondió apresuradamente dijo — Las sectas de cultivo lo cambiaron.

— Vaya.

Wu Xingxue dejó caer las manos. El sonido del metal resonando sonó con su movimiento.

...Parecía que estaba encadenado.

La reacción de la gente en la orilla a este sonido fue inmensa; sus cueros cabelludos hormigueaban. Miraron con cautela a la persona en medio del agua.

Solo vieron a Wu Xingxue vestido de verde oscuro, casi mezclándose con la niebla fría. Pero sin importar las muñecas dentro de sus mangas, o el tramo de tobillo que se asomaba por encima de sus pies descalzos, todo estaba blanco y limpio, sin señales de cadenas. Pero el sonido metálico estaba realmente allí.

Alguien murmuró suavemente — Ese sonido es...

— ¡Shh! ¿Estás loco? ¿Vas a traerlo delante de él? ¡Si buscas la muerte, no nos arrastres a nosotros también!

La persona que interrumpió tenía un miedo mortal de que el que estaba en el agua escuchara; incluso cuando regañaba, no se atrevía a levantar la voz.

Pero desafortunadamente, todavía fue escuchado.

— ¿Qué es? — preguntó Wu Xingxue. — No te detengas, continúa.

La multitud en la orilla dejó de respirar. Tragaron un bocado de saliva, y las manos que colgaban al lado de sus cuerpos temblaron suavemente — ¡No... no! Nosotros... no dijimos nada, realmente no dijimos nada.

Como todos sabían, el Territorio del Norte de Canglang era más peligroso que la guarida de un demonio. Los demonios y monstruos del mundo no temían las represalias y no estaban amenazados por sacerdotes y monjes; su único miedo era morir allí.

Los demonios que estaban aprisionados allí estaban todos clavados con pesados ​​candados celestiales[2]. Los candados no eran visibles y no se podían quitar; representaban el castigo del cielo. De un día a un año, los demonios que fueron clavados inevitablemente sucumbieron a la tortura, sus almas se dispersaron, tanto su espíritu como su carne se extinguieron.