Sangre para el Dios de la sangre

Capítulo 23: A través del fuego y las llamas nacen los verdaderos héroes

La semana siguiente transcurrió como de costumbre para Izuku. La única diferencia que esta vez fue el asesoramiento después de la escuela que el vampiro tuvo que tomar. Hound Dog estuvo a cargo de eso, usando su tiempo con el vampiro para hablar sobre los eventos que sucedieron en Hosu.

El vampiro colaboró ​​con su maestro, respondiendo las preguntas del hombre lo mejor que pudo. Izuku no se arrepintió de su curso de acción en el distrito, y le dijo claramente el hecho a su maestro; la culpa no estaba en su mente, ni tampoco el arrepentimiento. Por supuesto, algo de melancolía golpearía al vampiro de vez en cuando, pero endureció su resolución y soportó su carga. Lo venía haciendo desde joven, no era nada nuevo para él.

Los susurros y rumores sobre él habían aumentado entre los pasillos y salas de la UA, el alumnado todavía no estaba seguro de qué hacer con él. Sus sensibles oídos podían captar fácilmente los susurros y las conversaciones en voz baja de algunos alumnos de segundo y tercer año mientras discutían los rumores sobre él.

Izuku no era de los que prestaban mucha atención a los rumores e hizo todo lo posible por ignorar las miradas de reojo que ocurrían cuando pasaba. La hostilidad era bastante rara, pero el miedo a lo desconocido era una gran fuente de combustible para los rumores, especialmente dentro de una escuela secundaria.

Entre sus compañeros de clase, estaba claro que había ocurrido una división. No diría facciones, pero su salón de clases se había dividido en algunos clichés que tenían sus propias formas. Hubo quienes hablaron con calma con él y parecían en su mayoría no afectados por la casualidad de su lucha contra el Hero Killer y el noumu: Todoroki, Uraraka, Tokoyami, Kyouka e Iida.

Había quienes no querían al vampiro y no querían tener nada que ver con él o lo toleraban: Bakugou y Yaoyorozu.

Y estaban los estudiantes restantes que eran neutrales con él o se mantenían alejados de él: ese grupo estaba formado por los estudiantes restantes. Decir que hubo tensión en la clase sería quedarse corto, considerando las circunstancias.

Izuku nunca fue alguien que comparara o escalara sus dificultades con las de otras personas; la vida no era una competencia para ver quién había sufrido más después de todo. Sin embargo, no pudo evitar albergar algunos sentimientos hostiles hacia algunos de sus compañeros de clase, debido a este tipo de actitud. Sabía que era mezquino guardar este tipo de rencor contra aquellos que (justificadamente) le tenían miedo, pero al final seguía siendo un ser humano.

Tal tema había sido el foco de la sesión de hoy con Hound Dog. Sus sentimientos personales al respecto de la actitud tanto de sus compañeros como del alumnado hacia él. Fue una de las pocas sesiones de esta semana en las que Izuku tuvo problemas para expresarse. Normalmente el vampiro era bastante elocuente, aunque un poco reservado, con sus palabras y sentimientos. Encontrarse confiando en su lado salvaje para expresar lo que tenía en mente era un sentimiento inusual, ya que Izuku siempre intentaba usar solo su mente racional.

El vampiro salió de la habitación en la que había estado hablando con Hound Dog y soltó un suspiro de cansancio. Se preguntó si Mei todavía lo estaba esperando o si ya se había ido a casa. Ella había estado bastante entusiasmada en mostrarle algunas piezas de equipo de soporte que había desarrollado especialmente para él, lo que despertó la curiosidad del hemomántico sobre el equipo. También estaba el tema de los exámenes del primer trimestre.

El hecho de que UA fuera una escuela heroica no significaba que tuvieran libertad de acción para holgazanear en sus estudios. Izuku sintió que necesitaba estudiar algunos temas, toda la acción reciente dejaba poco tiempo para asuntos académicos. Podría programar una sesión de estudio con el mecánico para ver si había algo en lo que ella no estaba segura y ayudarla.