Little Smile|| Meanie

Twenty Eight

—Yo puedo dormir en el suelo, si gustas. —dijo el moreno con una timidez que logro sorprender al de cabellos negros.

Wonwoo solo soltó una pequeña risa y cerró la puerta una vez que ambos habían entrado a su habitación, el chico comenzó a buscar en sus cajones algo de ropa para dormir.

—Normalmente compro roma mas ancha por comodidad, pero dudo que te quede, eres mucho mas alto. —comenzó a decir Wonwoo ignorando por completo las palabras del moreno.

Mingyu solo asintió levemente y se sentó en la orilla de la cama, comenzó a pasar su mano por las sabanas tratando de que las pequeñas arrugas que habían causado sus cuerpos recostados sobre esta misma hace unos minutos desaparecieran en su mayoría.

—¿Cómo te sientes, cielo? —pregunto Mingyu aun sin quitar su vista de las sábanas.

Wonwoo tomo unas prendas y las acomodo de una manera demasiado especifica sobre la cama, miro a Mingyu y sonrió levemente, había extrañado demasiado ese sentimiento de seguridad que le producía el contrario.

—Estoy mucho mejor, y eso es gracias a ti. —dijo el mas bajo, tomo asiento a un lado del contrario y tomo una de las manos ajenas entrelazando sus dedos con los del moreno. —Gracias por venir, seguramente fue difícil. —dijo con cierta vergüenza en su voz.

Jeon estaba consciente, había sido una acción demasiado infantil, así como lo dijo Mingyu, tuvo que tomar las cosas con mas madurez, buscar formas para poder solucionar las cosas con su novio, pero solo se podía culpar en estos momentos por todas las cosas que pudo hacer y prefirió no hacer.

Mingyu miro al chico dejando de lado su tarea de eliminar las arrugas en las sábanas, sonrió levemente y negó.

—Me alegra haber venido, yo... Bueno, tu padre me comento que estabas algo mal, pensó que quizá yo podría levantarte el ánimo, pero no sabía cómo reaccionarias cuando me miraras. —comenzó a explicar, claro, omitiendo algunas cosas. —Pero, bueno, no puede decir que no, se miraba demasiado preocupado, solo quería darle algo de tranquilidad a él.

"Y a mi conciencia". Pensó Mingyu, las cosas no habían estado tan bien para Kim, como no era novedad, de nuevo, había tenido discusiones de rutina con su padre, fiestas y de más, pero al ver al padre de Wonwoo tan preocupado, su conciencia lo atormento aún más, ya por sí mismo se sentía mal al ignorar a Wonwoo por todos lados, ahora se sentía peor al ver que su juego de "la ley del hielo" si estaba afectando y de una manera demasiado negativa.

El menor comenzó a dejar pequeñas caricias en la mano del contrario y suspiro un poco, su mirada se clavo en suelo y continuo.

—Siento que pasara todo esto, no pensé que llegaría a este extremo.

Mingyu solo había ido a una de sus sesiones de terapia y había recibido la noticia de que la salud de su novio estaba decayendo de manera significativa.

El joven Jeon solo mordió levemente su labio inferior en señal de nervios, no pensaba que Mingyu se enteraría sobre lo que le estaba pasando, no era parte de su plan, en realidad, nada de lo que estaba pasando había sido parte de sus planes, pero ahí estaba, en su habitación, con su novio, y no era cualquier chico, era el famoso Kim Mingyu, así que algo que Wonwoo estaba comenzando a aceptar era que, desde aquella noche en que salvo a ese chico, su vida nunca volvería a ser predecible.

***

—Siento que viniera hasta aquí, pero el joven Kim salió esta mañana y no volvió. —dijo la mucama de la casa de los Kim de manera suave.

—Entiendo...—dijo el joven con voz apagada.

El brillo de emoción que tenia al momento de llegar a la residencia no había dejado rastro alguno, ya no estaba, ahora solo una expresión de desilusión se reflejaba en su rostro.