CAP 1

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Hola, soy Noelia, tengo 14 años, me gusta la lectura y las ciencias. Espero que podamos conocernos y ser amigos.

Dije nerviosa. Era el primer día de clase, un nuevo curso había empezado. Yo soy una persona bastante introvertida i tímida. Aparte de que no conocía a casi nadie de mi clase, sólo a mi mejor amiga Lydia.

Bianca: Muy bien, Noelia, ya puedes sentarte. 

Dijo la profesora Bianca. Mientras el siguiente alumno salía a presentarse, yo me iba a mi asiento. El primer día siempre es el más aburrido. Pero gracias a mi amiga el día no fue tan aburrido. Llegó la hora del recreo, yo como siempre fui con mi amiga a nuestra mesa. Hasta que llegó él...

Kevin: Bueno, bueno, bueno, ¿qué tenemos aquí? Dos nerds tontas sin amigos.

Sus amiguitos se empezaron a reír.

Noelia: ¿Quién eres tú y quién te crees?

Kevin: ¿No sabes ni a quién tienes en tu clase? Qué ridícula, por eso no tienes amigos.

Lydia: ¿Y yo qué soy, pedazo de desperdicio humano?

Kevin: Ah, claro, tú. Me había olvidado de ti. Tú eres su novia, ¿verdad?

Lydia: ¿Qué te pasa enfermito?

Noelia: Mira, déjanos comer en paz. No quiero problemas.

Kevin se quedó callado mirando primero a Noelia y luego a su bandeja de comida. Acto seguido le tiró la comida al suelo y se marchó.

Lydia: Qué asco de tío.

Noelia: Es increíble. Nada más empezar el curso en una nueva clase y ya tengo a un tonto arruinando mi vida. ¿Pues sabes qué? Esta vez no lo van a conseguir.

Lydia: ¡Bien dicho, nena!

Pasaron unos 15 minutos y el timbre sonó para nuestra siguiente clase. Los profesores se presentaban ese día, por lo que fue muy aburrido. De repente un papelito entró en mi campo de visión. Al abrirlo ponía: "Mira detrás tuya." Al girarme vi a Kevin. Este se rió al verme.

Kevin: ¿Qué pasa? Ya sé que soy guapo, ¿pero tanto como para que te quedes ensoñada mirándome?

Noelia: Imbécil.

Me giré de nuevo y seguí con mis cosas. 

El día acabó finalmente. Recogimos nuestras cosas y salimos por la puerta, cada uno a su casa. Lydia me acompañó como siempre, ya que éramos vecinas. ¡Pero vaya! ¡Qué sorpresa! Kevin nos estaba siguiendo. Por el camino, pasamos por un cubo de basura y sí, Kevin me lo tiró encima. Se rió y se fue por otro camino.

Lydia: Menudo cretino. ¿Estás bien, cielo?

Me quedé callada unos segundos, llena de furia. Respiré hondo y me calmé.

Noelia: ¡Sip! ¡Estoy estupenda!

Lydia: ¿Seguro? No sé si te has dado cuenta, pero te acaban de tirar un cubo de basura en la cabeza.

Noelia: ¿Sabes? Es mejor que el resto del viaje vaya yo sola. Necesito estar sola.

Lydia: Pero si vivimos en la misma zona.

Noelia: Pues cámbiate de acera.

Lydia: Noe, si te pasa algo, sólo dímelo. Puedes confiar en mí y lo sabes...

Noelia: ¡Todo bien, Lydia! ¡Chaoooo!

Aceleré y me fui corriendo a casa. Sentía un nudo en la garganta. Otra vez esta pesadilla no, por favor. Llevo toda mi vida recibiendo bullying y ya estoy harta. Muchas veces he pensado en suicidarme y acabar con esto de una vez. Pero luego recuerdo que eso sería hacer que ellos ganen, porque quieren que me muera. Llegué a mi casa y subí las escaleras a mi cuarto y me tiré a la cama a llorar. Luego recordé que estaba cubierta de basura y me fui corriendo a bañarme y relajarme un rato.

Me enamoré del badboy de clase | CANCELADA |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora