Trifásico || Yuta x Maki || Jjk

1. Amor

No había un lugar más seguro en el mundo que estar a lado de Satoru Gojo, por lo que ir en una misión con el no representaba un problema hasta tener que intercambiar palabras con el.

-¿Entonces entre Yuta y tu hay algo?- pregunto mientras pasaba su pierna encima de la otra con una sonrisa traviesa en el rostro

¿Que clase de pregunta era esa? Lo miro intentando estudiar su expresión pero era claro el completo rostro juguetón detrás de esa pregunta, la estaba molestando.

-No creo que valga la pena preguntar algo que es evitende- no lo miro mas, encontrando mas interesante la vista de la ventana
-Me esta diciendo que si hay algo-
-Te estoy diciendo que no hay nada- desafío
-Mi misión es guiarlos como su profesor, asi que puedes abrirte conmigo en busca de un consejo- su tono fue tan sereno que parece hablar enserio
-No te hagas el héroe, no necesito abrirme contigo porque no hay nada que contar-
-Al menos no de tu parte, eso me queda claro- esta vez fue el quien miro a otro lado
-¿Estas intentando llegar a algo?-
Suspiro- Yuuta tenía razón- dijo casi finalizando la conversación

El sonido tranquilo de la gente durmiendo a su alrededor volvio a dominar entre ellos, pues aun faltaban unas horas para aterrizar.

-¿En que tenía razón?-

Escucho por fin la pregunta de la chica aunque había hablado más bajo de lo normal, el simple hecho de que siguiera la conversación ya era una victoria y no se molestaría en disimular la sonrisa de satisfacción que se le dibujo en el rostro.

- Ya he tenido esta conversación con el y su respuesta me dejó muy sorprendido, pero antes de hablar, me dirás tú versión de los hechos-
-Mi...- Maki pensó un momento sobre cómo responder

No es que no lo hubiera pensado antes, pero no sé sentía cómoda hablándolo con alguien, menos si ese alguien era Satoru Gojo la persona menos sería del mundo con quien tenía una relación de respeto por su gran fuerza pero solo eso, su personalidad no era la mejor y sabía que Yuuta también le tenía un profundo respeto pero no imagino que su relación fuera tan estrecha como para contarle sobre sus temas amorosos... Se detuvo al momento que esa palabra se estableció en su mente "amorosos" y la imagen de Panda revivió de entre sus recuerdos el como le insinuaba cada que podía el como tenía una oportunidad con Yuuta.

-¿y bien? - pregunto su profesor
-No es como si...- sus palabras se fueron apagando- a todo esto ¿Porque lo preguntas ahora?-
-Curiosidad, estamos por reunirnos con el después de que no lo has visto en meses y si hay algo por lo que deba tener precauciones adicionales quisiera saberlo-
-No creo que sea necesario- dijo cortante- no hay nada por lo que tomar precauciones, después de todo vengo por una misión no de vacaciones -
-Okey- la entonación de Gojo se alargó al ver la postura defensiva de la chica

No comentaron nada más al respecto, ni siquiera cuando llegaron al hotel donde se alojaban, ese tema se podía dar por terminado.

Treinta minutos después se reunió de nuevo con Gojo después de poner ropa más cómoda para el caluroso clima del lugar, pero era inevitable llamar la atención con el deslumbrante aspecto de su profesor aunque traía ropa muy sencilla el aura que lo rodeaba era atrayente pero ya estaba acostumbrada. Caminaron por las estrechas calles en las cuales era inevitable perderse en la excentricidades de aquel país extranjero tan distinto al suyo la gente se movía rápidamente con una naturalidad acalorada, el ajetreo matutino combinaba con el clima como si fuera lo más normal del mundo que era difícil verlo como algo extraño la gente hablando con fluidez en un idioma que no entendía, sin embargo, bien podría identificar de que trataba su conversación con los gestos y tonos que le demostraban, se encontró a si misma disfrutando de los exóticos escenarios del lugar admirando los matices de otra cultura que olvidó por completo que es lo que hacía ahí hasta que su mirada cruzo con algo familiar, su pelo estaba mucho más largo que la última vez, las ojeras bajo sus ojos de un profundo azul no habían disminuido ni un poco, su sonrisa inocente que le daba ese aire de calma sobrecogedora lo irradiaba con naturalidad, su mandíbula estaba las recta y cuadrada dándole un porte serio que descendía por su ellos hasta sus hombros ahora anchos y notoriamente más fuertes demostrando confianza, como si la carga que llevaba ya no fuera más un problema pero aún así estaban tensos porque para ella era fácil verlo, como la corriente de energía maldita emanaba desde el interior de su chaqueta a la altura de su clavícula para rodearlo por el cuello que bien podría abrazarlo o estarlo ahorcando.