Capítulo 5

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Lucio tenía razón, Gia y Loretto siempre estaban juntas y siempre se contaban las cosas, igual que nosotros.

-Hablando de tu señora.
-...

-Lucio déjame hablar con Marcelo.
-Hola Loretto, tiempo sin verte, me da gusto que pasaras un verano increíble; yo también la pase bien.
-¡Lucio por favor, déjame a solas con Marcelo!

-¿Está bien amigo?
-Sí.
-Nos vemos en el almuerzo.

Adria, Lucio y yo estudiábamos diferentes carreras, Adria estudiaba Arquitectura, Lucio estaba en Ingeniería ambiental y yo en Comercio internacional y las chicas estudiaban Marketing digital.

-¿Qué pasa? Tengo clase en 15 minutos.
-Eso es lo que quiero saber Marcelo ¿¡Qué pasa!?... ¡No me has hablado desde que llegaste a la universidad, te fuiste con esa chica que quién sabe quién es, me estás evitando y...!
-¡Esto es lo que me pasa Loretto!
-¡Yo... Yo te puedo explicar eso!
-¿¡Qué me vas a explicar, que tu viaje a Ibiza fue con tu ex?... Loretto esto se terminó, no quiero estar más contigo, terminamos.
-¡Marcelo por favor déjame explicarte!
-¡No Loretto, no quiero escuchar nada que venga de tu boca, no ahora... Me tengo que ir, nos vemos luego!

Le quité mi celular a Loretto y me fui a mi salón, no quiera hablar de eso en la escuela, pero ella no me dejó otra opción. Por suerte mis clases empezaron poco después de que entré al salón y eso me mantuvo distraído toda la mañana, a la hora del almuerzo me quedé a terminar un trabajo que habíamos empezado en la clase; así que no salí, pero Adria fue a buscarme.

-¿Se puede?
-Hola, pasa.
-Te traje un emparedado y un jugo.
-Gracias.
-¿Cómo estás?
-Confundido.
-Si de algo te sirve, estoy de tu lado.
-¿Y tu hermana?
-Loretto es mi hermana y la quiero, pero lo que hizo no está bien, ella sabía lo que hacía y yo sé lo dije.
-Gracias Adria.
-Te dejo para que termines tu trabajo.
-¡Adria!
-¿Si?
-De casualidad no has...
-¿Visto a la chica?... Toda la escuela la ha visto, es el tema de conversación en la cafetería.
-¿Ah si?
-Pues claro, es linda, extranjera, estudia diseño de modas y... Es soltera.
-¿Y tú cómo sabes todo eso?
-Franco no ha dejado a la chica ni un momento, al parecer está interesado en conocer a la extranjera.
-¿Franco?
-Sí.
-Ese idiota.
-¿Sigues odiándolo?
-No lo odio, es solo que es un imbecil.
-Eso no se puede negar... Bueno, te dejo ¿Nos vemos más tarde?
-Seguro.
-Ok, adiós.
-Adiós.

Mariana
-Así que eres Americana.
-Sí, así es.
-¿Es tu primera vez en Italia?
-Sí, es mi primera vez aquí.
-Cuando quieras puedo darte un recorrido por la ciudad o llevarte a Venecia o a Roma, a donde quieras.
-Gracias... Pero no gracias.

-Franco amigo mío ¿Qué haces aquí? Este es el área del los chicos de primer año, tú aula está DEL OTRO LADO DEL CAMPUS... La detección es hacia el sur por si no lo sabes.
-Siempre tan impertinente Lucio.
-Si bueno, es más que obvio que ya tienes harta a la señorita, ya déjala en paz.

-Siento la molestia, Franco no sabe distinguir cuando ya no lo soportan a cuando lo odian, es normal en él ser tan idiota.
-¡Ah mira!

No pude evitar reír por lo que el chico había dicho, pero tenía razón y Franco ya me había hartado, no dejaba de intentar invitarme a salir y ni siquiera me conocía y ni siquiera me dejaba hablar, ya me había contado todo lo que sus padres hacían y de lo que él iba a heredar cuando ellos murieran, era tan nefasto. Por suerte el chico que llegó lo hizo que se fuera y así dejarme en paz.

-¿Estás bien?
-Sí, gracias.
-Franco es insoportable lo sé, por cierto soy Lucio.
-Mariana; muchas gracias por salvarme de él.
-No es nada, los amigos de mis amigos, son mis amigos.
-¿Cómo dijiste?
-Eres amiga de Marcelo ¿No?
-Eso creo.
-Yo soy amigo de Marcelo, somos como hermanos así que, también puedo ser tu amigo ¡Claro, si quieres!
-Bueno, no tengo amigos aquí así que no veo porque no.
-¿Me puedo sentar?
-Por supuesto.
-Gracias.
-¿Galletas?
-No gracias, estoy bien.
-Okay.
-¿Así que eres amigo de Marcelo?
-Sí nos conocemos desde que nacimos, literal.
-¿Ah si?
-Sí, nuestros padres son amigos desde la universidad.
-¡Ah ya veo!

-¡Lucio!
-¿Qué quieres Loretto?
-¿Has visto a Adria? No lo encuentro por ningún lado y no me siento bien.
-No lo he visto, debe estar con Marcelo.
-¡Es un maldito traidor!
-¡Aquí no vengas a tirar tu veneno, sabías lo que podía pasar y aún así lo hiciste! No esperes que Adria este de tu lado.
-¡Es mi hermano!
-¡Es una persona razonable!... Y si no tienes nada más que decir por favor vete, estoy ocupado.

La hija de mi mejor amigoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora