Romanov | Un nuevo comienzo

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Ulises D'Amico

-Cancela todo lo que tengo hoy- señale a Mario

-¿Qué paso?-

-Simplemente tengo otras cosas que hacer- tome mi celular y las llaves de mi auto

No quería estar en la empresa en estos momentos.

-Sabes que no debes dejar la empresa sola- respire para mirarlo

-Por mitad de un día no se moriran, solo debo detener mi maldita boda- tire todo lo que tenía en mi escritorio

Estaba muy enojado conmigo mismo.

Sentía muchas cosas por Dafne que no podía seguir en esta falsa y perderla.

-Ire al bar a trabajar y si algo importante pasa solo enviamelo- el asintió para no detenerme

Tome mi elevador para irme de la empresa, pero nada sale a mi favor

-Amor- cerré mis ojos al ver a Crystal

-Mira mi padre vino a verte- Salí del elevador para evitar que se subieran conmigo

-Ah- hice una mueca

Nunca me había caido bien el señor.

-Venimos a almorzar- sonreí para no gritarle

-Creo que mi empresa no es un restaurante- camine directo a la puerta de salida

-Entonces invitame a un restaurante- gire para quedar frente a ellos

Crystal me rogaba con sus ojos, pero lo menos que quería es acumular puntos con su padre.

-Creo que quién viene de visita es el que invita- coloque mis manos en mis bolsillos

-Veo que no eres ya ese niño ingenuo- golpeo mi mejilla

-Veo que sigue siendo el mismo viejo que solo se aprobecho de mis padres- di un paso hacia atrás para alejarme de él

-Solo le dire que no tendremos un almuerzo junto, lo menos que quiero es empeorar mi día y segundo no se preocupe que la boda no ocurrira ya casi tengo el dinero-

Me fui sin dejar que hablara.

Necesitaba que esta colección fuera buena como la primera.

-Ulises- Crystal me tomo de mi mano

-Iras con mi padre a comer- ella me ordeno y lo menos que yo hacía era seguir instrucciones

-Lastima que  tienes un prometido que no te ama y mucho menos sigue tus ordenes- hice una mueca con mi boca para irme

No la quería lastimar, pero ella debía entender que no quiero nada a su lado.

Me subí a mi auto y sali de ahí sin mirar hacia atrás.

Una vez en el bar entre por el area del resaturante.

-Señor no esperabamos tenerlo por aquí- sonrió una de las meseras

-Cuando puedan me preparan mi almuerzo y me lo llevan a mi oficina-

Ella asintió para yo continuar con mi camino.

Me quite mi saco ya que aquí no necesitaba tanta la formalidad.

En mi oficina ya no habían tantos documentos, pero mi correo electrónico estaba que no aguantaba más de cada mensaje.

Trabaje con los números del bar, necesitaba aumentarlos para tener un poco más de dinero.

-Su almuerzo- una chica hermosisima entro con mi almuerzo