Un virgen para el mafioso..(LEOFIAT). Terminado.

capitulo..-10....Final.

Deslizó su mano por el pequeño cuerpo desnudo al lado suyo, leo sonrió al ver los hermosos ojos de Fiat. Ahora su cuerpo es solo de un hombre quien lo ama con lucura. Además este hombre no ve tú cuerpo si no tu alma.

Fiat suspiro profundamente cuando leo empezó a bajar su mano había bajo por en medio de las sábanas hasta llegar en su entrada. Fiat jadeó un poco cuando sintió los dedos de leo ahí.

—Aun estás muy apretado,—Leo dijo con tono pervertido. Esto hizo que Fiat este tímido. Han estado por tres días ahí. Y lo han hecho más de tres veces.

—Espera, aún no.—No termino de hablar cuando leo lo beso apasionadamente mintras se sube ensima suyo. Fiat sintió nuevamente ese palpiteo en su cuerpo y corazón.

—Me gusta besarte, eres tan delicioso,—Llego hasta su cuello para devorarlo, le abrió las piernas a Fiat y moverse buscando su entrada para poder meter su gran pene y poder darle placer a Fiat.

—Ahh...ahí, si.—Fiat cerro los ojos con fuerza cuando leo entro tan profundo en él.

—Ahi, lo quieres más en ti.—Fiat no respondió, solo beso sus labios y empezó a mover sus caderas haciendo que leo empieze a moverse fuertemente.

—Ahh...leo..—Empezo a gemir como loco, leo sabe que le da justo en su sensible próstata haciéndolo gemir mientras sigue moviéndose rápidamente.

-—Te gusta bebé,—Leo pregunta, Fiat solo puede abrir la boca para respirar, su cuerpo está siendo consumido por ese hombre quien está ensima suyo penetrandolo fuertemente.

—Me gusta,—Dijo entre cortadas, leo siguió moviéndose rápidamente haciendo un sonido en la cama, ahora no era cuidadoso, siguió moviéndose rápidamente entrando en salieron haciendo un sonido exquisito.

—Ya no,—Fiat termino corriendose entre sus cuerpos desnudos. Leo sintió la esencia de leo y se movió más rápido y unas cuantas embestidas termino corriendose dentro de Fiat.

—Fiat solo gemia sintiendo esto, después de unos segundos leo atrapó sus labios para besarlo con pasión atrayendo ese cuerpo pequeño con la suya.—Te amo, y serás siempre mío.

—Fiat no hablo, solo se quedo ahí acostado mientras leo lo sigue besando y penetrando una vez más. En la madrugada dos cuerpos están descansando ahora. Fiat despertó primero dándose cuenta que son las tres de la mañana. Se movió un poco para ver el rostro de leo. Ahí se quedo contemplando el rostro del hombre quien lo ama como es.

—Me estás viendo.—Leo abrió los ojos y ver a Fiat.—Lo hago.

—Leo sonrió, estaba por darle un beso cuando escuchó un sonido afuera.—Quedate aquí, deben ser ellos.

—Los hombres de mi tío.—Si, no te muevas.

—Fiat se levantó, ahora está con el corazón latiendo desenfrenadamente. Vio a leo tomar una pistola. Después salió afuera. Fiat se sentó en la cama mientras espera.

—Un fuerte disparo se escuchó, Fiat grito y se levantó para salir aver, pero en eso más disparos se escucharon.—Leo, ¿Donde estas?.

—Salio de la habitación cuando fue atrapado por alguien.—No te muevas.

—Susurro en su oído,— ¿Tú?.—Fiat conoció la voz de su tío.

—Jefe, entraron. Están adentro.—La casa era grande y puertas por todos lados, leo disparo había ellos. Después entro adentro donde están las habitaciones.—Fiat, aquí.

—Grito mientras corría, sus hombres detrás de ellos, pero unos segundos después fueron disparados. Se ocultaron rápidamente.—¿Esta bien?.—Sus hombres preguntan.