Demasiado exhausto para su propio bien, justo después de obtener su dosis diaria de esperanza y luz del sol Macaque no pudo evitarlo y se rindió ante el cansancio aferrado a sus viejos huesos, demasiado irónico que alguien que había estado muerto al menos un par de milenios pudiera caer dormido tan fácilmente. Al lado de su propia tumba de la cual acababa de salir como un jodido zombi, si, nada raro.
Cerrando los ojos e ignorando olímpicamente los gritos de la demonio de huesos, Macaque se fue a dormir con tranquilidad, sabiendo que al menos la siguiente vez que abriera los ojos no tendría un bastón dorado en su periferia. Se acomodo contra la hierba usando su bufanda rota como manta, le dio un último vistazo al cielo.
. . .
Cuando abrió los ojos de nuevo se topo con el naranja azulado del cielo, el día se había desvanecido dando paso al crepúsculo, casi de noche. Levantándose de su lugar el aun adolorido pero ya no tan cansado celestial soltó un largo suspiró, estirando sus brazos hacia arriba dejando salir la somnolencia de su cuerpo.
De pie en aquella colina finalmente pudo prestarle la debida atención a los detalles que antes no pudo notar, por ejemplo los varios árboles de fruta al rededor del páramo ubicados de una forma casi perfecta para que estuvieran en un arco al rededor de la tumba, o las múltiples flores de colores cálidos y púrpuras repartidas por la llanura, dándose un momento para recoger una violeta de entre la maleza no pudo evitar pensar que combinaba con sus orejas. Todo era precioso de una forma sutil que iba muy acorde con lo que era Macaque, tal cual como si alguien hubiera colocado todo de esa forma para él.
Mirando a sus espaldas pudo divisar con claridad la lápida junto al hueco en la tierra del que había salido horas atrás, no pudo evitar sentirse sorprendido viendo el fino mármol blanco con el que está estaba construido, los grabados marcados sobre el blanco con un tono plateado y los ornamentos que adornaban las esquinas de la lápida parecían costosos, hechos de oro, plata y jade. Sin contar que a los pies de la lápida yacían aún más joyas, piedras preciosas y flores.
Todo demasiado pomposo para su gusto pero agradecía el gesto, de que al menos alguien tuviera la decencia de enterrar su cadáver de forma digna una vez que Wukong seguramente dejara su cuerpo muerto en alguna zanja.
Aún así no pudo evitar sentir confusión, ¿Quién se tomaría tantas molestias para hacer esto? Inmediatamente pensó en la familia Bull, pero esto no parecía para nada su estilo, Gongzhu siempre había sido más del tipo de dama que prefería los mausoleos elegantes antes que el rudimentario entierro a la intemperie. Su corazón se apretó al pensar en su hermana jurada, ¿Siquiera había podido despedirse de su cuerpo? ¿Wukong la había dejado darle un último adiós? Por amor a Buda esperaba que así fuera.
Pensar en todas esas posibilidades lo hicieron sentirse aún más miserable. Necesitaba enfocarse, concentrarse en algo que no fuera el pasado y lo mucho que le dolía.
Dejar tantos adornos costosos en un tumba de hace miles de años y encargarse de mantenerla etérea y en buen estado aún después de tanto tiempo, era un trabajo demasiado laborioso y generoso. Algo que sinceramente no merecía, se hubiera conformado con un entierro tranquilo. En fin, no es como si fuera a quedarse para descubrir quién era su patrocinador.
Ignorando la media luna grabada en el mármol de la lápida el guerrero empezó a mirar al rededor buscando algún camino para bajar de la colina sin intenciones de quedarse ahí ni un segundo más, entonces fue cuando se dio cuenta de algo; no tenía ni la más mínima idea de donde estaba.
No sabía dónde lo habían sepultado o siquiera donde estaba parado, era como estar suspendido a la deriva en un océano de oscuridad solo por que alguien que no conoce decidió enterrarlo en la parte más estúpidamente remota del mundo.
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runaway from the sun ── 𝘀𝗵𝗮𝗱𝗼𝘄𝗽𝗲𝗮𝗰𝗵 [𝗹𝗺𝗸]
FanfictionSinceramente, después de ver el borde dorado del bastón de Wukong yendo hacia su cara Liu'er no esperaba seguir respirando. Pero la siguiente vez que abre los ojos se encuentra muy sorprendido y aparentemente también muy vivo. Teniendo que abrirse p...