"𝐴𝑦𝑢́𝑑𝑎𝑚𝑒 𝑎 𝑠𝑒𝑔𝑢𝑖𝑟 𝑎𝑑𝑒𝑙𝑎𝑛𝑡𝑒..."

Un poco de sal y brillo

Desde el momento en que te vi,
no fui consciente de todo lo que ibas a suponer.

Di por hecho que eras uno del montón,
otro sin corazón,
un chico que se divierte expandiendo odio y malas morales.

Pensé que volvería a caer,
en el mismo pozo,
aquel en donde me rompí las uñas escalando.

Analicé tu mirada,
tus gestos,
diciéndome: "te voy a calar".

Pero, por tu culpa,
ahora me encuentro embelesada.
Extrañándote cuando tus brazos no me rodean.
Detestándote cuando no me respondes.
Adicta a tu cuerpo.
Encantada por tu buen humor,
aquel que opaca el mío,
que es un horror.

Por tu culpa,
necesito tu aprobación.
La aceptación,
por parte de tu ser tan bondadoso.

Por tu culpa,
ansío volver a juntar nuestros labios,
para nunca más separarlos.

Por tu culpa,
siento miedo,
por quererte tanto,
y tener siempre presente,
que nunca será suficiente.
O que a lo mejor,
te daré motivos,
para apartarte,
y así nunca más verte.

Tantas cosas que me gustaría decirte,
pero hay algo más importante que contarte:
Gracias por haberte cruzado en mi camino,
y haberme demostrado,
que no todo son desdichas,
y que realmente hay personas buenas,
habitando en este planeta,
tan sombrío y bello a la vez.