Después de tanto reflexionar el principito se enteró sobre l drama de los baobabs, el me interrogó gravemente preguntó ¿ es verdad, no es cierto que a los corderos les gusta comer arbustos?. El principio dijo que no comprendió que los corderos comían arbustos y también agregó como es que también comen baobabs, y le dio a note al principito que los baobabs no son arbustos. Si no arboles grandes como Iglesias y que aún así si llevará una tropa de elefantes no se los acabarían y fue así como el principito entendió.
No obstante en en el planeta d del principito, como en todos los Planetas, había hierbas buenas y hierbas malas. Como resultado de buenas semillas y buenas hierbas y de malas semillas de malas hierbas.
En el planeta del principio le gustaban las puestas del sol ya que eran bellos y obstante hermosos, decido mostrar el grandioso atardecer. Al quinto día me fue revelado la vida del principito gracias al cordero. Me pregunto bruscamente y sin preámbulos. -si un cordero come arbustos, ¿comen también flores? -un cordero come todo lo que encuentra -¿hasta las flores que tienen espinas? Dudoso de la respuesta creía que las flores y sus espinas eran peligrosas, por lo que lo puso más en duda fue que el principito no contestaba nada. Hasta que dijo que las flores tenían que florecer con sus espinas y que los corderos así las comían.
Después decidió plantar un flor sencilla y así fue cuando decidió cuídala y admirarla a quien en lo que florecía, la regaba, hablaba con ella sobre sus cuatro espinas. Tomaba la puestas de sol con ella. Ella le temía al aire, ya que temía ser fatal para ella las corrientes de aire, el principito le dio tanta confianza a la gorra que dudo de ella ya que había tomado muy enserio sus palabras sin importancia y se sentía muy desgraciado por qué pensó dudosamente debía haberlo escuchado ya que la flor le confió que nunca debía haber escuchado a las flores ya que solo debían perfumar y oler su aroma, es así como tu aroma perfumaba todo mi planeta, ya que solo lo perfumaba y lo iluminaba con su grandioso aroma y belleza de aroma , dudo y dijo ¡las flores son tan contradictorias! Pero yo era demasiado joven para saber amarla y apreciarla a su belleza y aroma que tenía la bella flor.
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