" él se rió, tocó la cuerda e hizo girar la polea. - ¿Oyes ese ruido?, Estamos despertando este pozo y de se despierta cantando" Lo que iba a pasar era inevitable. No gritó, cayó como cae un árbol: suavemente. "- Cuando por la noche mires al cieloz estaré en una de esas estrellas; y como yo reiré te parecerá que todas las estrellas ríen para ti. ¡Tú tendrás estrellas que saben reír!".
El principito fue alguien que conoció hace seis años, y que ahora se siente un poco más consolado como para poder contarlo, pues disfruta las noches con las estrellas riéndo, haciéndole saber que el principito ríe y que está cuidando a su rosa, esperando que su cordero no se coma a su preciada flor.
A consecuencia de la avería de avión, ya habían pasado 8 días y el agua se había acabado, quería hacer entender al principito de la gravedad de la situación, pero este simplemente dijo que vayaran a buscar un pozo, como si fuera sencillo encontrar uno en medio del desierto.
Había pasado la noche y ambos cansados se recostaron poniendo enfasis en la bella vista del desierto. El principito durmió, pero el aviador siguió caminando hasta que en la mañana siguiente llegaron a un pozo.
En el pozo, el principito no tenía energías para regresar. El aviador lo hizo y logró reparar el avión, incluso con pocas esperanzas. Cuando regresaba a por el principito, encontró una serpiente, de esas que con una picadura era suficiente para perecer en el momento. Y más adelante estaba el principito, víctima de quien mordía solo para hacer daño. "Si entonces un niño va hacia ti, si tiene cabellos de oro, se ríe y no responde cuando se le pregunta, adivinarás quién es.
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