Capítulo 8: Grosero

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Durante el cambio de clase en los pasillos, mientras todos se dirigían a sus salones, pudiste ver a lo lejos la inusual vista de Katsuki Bakugou, este caminaba junto a un muchacho de llamativa cabellera de color rojo intenso y dientes afilados como los de un tiburón. El nombre de este chico era Kirishima Eijirou, tenía el número ocho de estudiante en la clase 1-A y curiosamente aquel número era también su posición en la división de primer año del festival deportivo.

Lo sabías porque, al igual que casi todos los de su clase, era popular entre los estudiantes de gerencia.

Parecía que ambos eran buenos amigos, esto debido a que el pelirrojo conversaba de manera enérgica con el rubio, quién, aunque ceñudo como era habitual, le escuchaba atentamente.

Decidiste no interrumpir entonces y tan solo ignorar su presencia como este hacía en las repetidas ocasiones en que lo saludabas desde la distancia. Posiblemente no se daría cuenta, pero esa sería tu discreta venganza.

Sin embargo, apenas y le pasaste por el costado sin detenerte, este te agarró firmemente de la muñeca, halando tu cuerpo hacía el suyo.

-Oye, ¿acaso hay algo mal con tu vista? -cuestionó Bakugou en tono protestón.

Por su mirada aparentemente agresiva cualquiera que lo viese, pensaría que estaba buscando pelea; ahora que le conocías, sabías que esa era su mirada normal.

-¿Porqué? -le respondiste con indiferencia, redirigiendo tu vista hacia su mano que aún sostenía tu muñeca.

Bakugou chasqueó su lengua, soltó tu brazo y cruzó los suyos.

-No me saludaste. -te reprochó.

Aquello te causó un poco de gracia. En especial porque el muy bribón nunca respondía a los mensajes de "buenos días" que le enviabas cada mañana.

-Hola, Bakugou. Aunque, ¿creí que ya te había saludado hoy en la mañana? -le dijiste refiriendote a su mensaje diario.

-E-eso es diferente.

Su amigo, quien permanecía quieto y callado de pie en un costado, miraba la escena atento con una expresión de asombro y curiosidad.

-Ah, hola para ti también. -le saludaste con una leve reverencia, temiendo actuar con mala educación.

El muchacho permaneció rígido por unos segundos, como si estuviese acaso frente a una figura imponente y se posicionó firme como soldado.

-Hola. Yo soy Kirishima Eijirou. -te respondió finalmente, extendiendo su mano al tiempo, un poco titubeante.

Al parecer los amigos de Bakugou eran peculiares al igual que él.

-Es un placer conocerte. Mi nombre es *N. -le devolviste su saludo con una sonrisa, dándole un apretón a su mano, esta era áspera al tacto pero el agarre era suave.

Luciendo notablemente fastidiado con su interacción, Bakugou separó sus manos con un golpe *tegatana limpio.

-Ya, ya. Suficiente de presentaciones. -se quejó el rubio.

-¿...Siempre eres tan grosero? -está vez te quejaste tú, levantándole la ceja.

-¿Qué quieres decir con grosero? -exclamó Bakugou ofendido- Tú eres quien pasó junto a mi sin siquiera saludarme, ¿qué? ¿acaso te avergüenza que los demás nos vean hablando?

Suspiraste.

Su actitud te resultó ridícula. Pues si había alguien que debía ofenderse, eras tú. No entendías lo que le pasaba. Quién parecía no querer involucrarse contigo frente a otros era él.

-¿Creí que eras tú quien se avergonzaba de mí? -lo confrontaste directamente, cruzando los brazos sobre tu pecho con firmeza- ¿No eres tú el que siempre trata de que nadie nos vea cuando estamos almorzando? Además nunca me respondes cuando te saludo desde lejos.

Al escucharte, Bakugou se te quedó viendo como pasmado. Era un gesto completamente nuevo en el que sus cejas se estiraron y cayeron y en el que sus labios se fruncieron profundamente formando arrugas en la barbilla.

Bakugou estaba haciendo un puchero.

-E-eso no fué... -balbuceo él avergonzado. Para después rascarse la nuca y chasquear la lengua nuevamente en frustración- No volveré a ignorar tus saludos. Así que... tu tampoco... vuelvas a ignorarme.

No te miró a los ojos y mantuvo sus labios fruncidos. Nuevamente sentiste esa presión en tu pecho y el invasivo pensamiento de querer pincharle con fuerza las mejillas te llenó la cabeza.

-Esta bien. Es bueno que al fin entiendas lo que se siente ser ignorado. -te burlaste de él con la barbilla alta.

Entonces el pelirrojo, hasta ahora silencioso, se echó a reír a carcajadas.

-Increíble. Nunca antes ví a Bakugou ceder durante una discusión. -exaltó entre risas, agarrándose con firmeza el abdomen- ¡Si que han de llevarse bien ustedes dos!.

Y la combinación entre la cara al rojo vivo de Bakugou y la contagiosa risa de Kirishima fué suficiente para plantarte una sonrisa durante el resto de las clases.








*Notas del autor

Uyy pelea de Nobioss 🤭💕

Ya lo avergonzamos frente al compa 👁👄👁

*Tegatana: golpe de kárate, caracterizado por usar la parte de la mano opuesta al pulgar, desde el dedo meñique hasta la muñeca.

🧨La Extra Y El Héroe Explosivo🧨 Katsuki Bakugou Donde viven las historias. Descúbrelo ahora