encuentro en la azotea

Los cielos despejados eran bastante agradables de ver, un punto en el que aquel azul parecía ser lo más interesante en el mundo, apenas cubierto de alguna nube que podía hacer la perfecta sombra para que no se sienta tanto el calor del sol, daba la perfecta paz que Izuku buscaba en su día de mierda, mejoraba todo lo suficiente para seguir un día más.

Hoy cómo siempre le fue horrible en la escuela teniendo que aguantar a los chicos que constantemente se burlaban de él, ya sea por no poseer quirk como los demás, ser un enano sin remedio o simplemente por como es su físico tan flaco como un fideo, también estaban las miradas de asco del género contrario que parecía divertirse de su inocencia y al igual que los chicos de su físico comparando constantemente a Izuku con el rey de la escuela Bakugo Katsuki resaltando mucho que nunca jamás en su, vida estaría con una chica, por lo menos no tendría que aguantarlos mucho dentro de poco podrá irse de esa maldita escuela y seguir su camino como héroe.

A veces no entendía porqué razón meterse con la gente de tal manera, tal vez es muy blando para entenderlo? Muchas veces trataba de encontrar la gracia en lo que le hacían, mirar el lado divertido y positivo como dijo su madre y por más que lo trate le sigue pareciendo tonto, inmaduro y hasta involucionado.

Suspiró siguiendo mirando el cielo, deseando con todo lo que tenía irse de ese lugar, de esa escuela. No podía hacerlo por la situación financiera de la familia, sus padres solo lo podían tener en aquella escuela patética y siempre pidieron paciencia a su hijo, con respecto a las burlas muchas veces lo habló tanto con sus padres como con los maestros, siendo los últimos muy mediocres en lo que hacían para detener el problema, sus padres por lo menos trataron de hablar con las familias sin mucho éxito.

Izuku- por lo menos aquí estoy a salvo... - murmuró para si mismo, lo bueno de esta última broma de Bakugo era que lo dejó encerrado en un buen lugar donde podía relajarse y no el horrible armario donde guardaban los utensilios de limpieza- al menos puedo decir que es un bonito día...- miró al cielo en completa calma, ya pensaría después como bajar del techo de la escuela

Se quedó allí pensando y haciendo sus tareas para agilizar la cosa, organizar sus libros de análisis de héroes y agregar cosas que en el momento parecieron simples acciones sin sentido en el patrón de los héroes, el calor tan relajante y el viento tan fresco hizo lo suyo en el cuerpo tenso y rígido de Izuku por lo que a la hora ya estaba durmiendo en contra de la puerta, teniendo un merecido descanso luego del día tan difícil.

- oye chico despierta... - se escuchó a lo lejos y poco a poco Izuku despertaba sin saber que pasaba

Izuku- que? - abrió lentamente sus ojos, la voz que lo llamaba sonaba un tanto irritada, tal vez Bakugo? Puede ser- eh?- frotó sus ojos tratando de adaptarse a la luz de la tarda

Mirko- hasta que por fin despiertas mocoso- frente al pecoso estaba la heroína del top diez con su semblante molesto y su caracter fuerte

Izuku- esto.. Mi... Mi... Mirko! - señaló incrédulo a la chica conejo que le miraba entre la irritación y la incredulidad

Mirko- no, es el conejo de pascua, claro que soy Mirko mocoso! - gritó al pecoso que inconscientemente cerró los ojos y se retrajo contra la puerta

Izuku- perdón.... Es solo que... Yo... Usted... Es la azotea y...- trataba de dar excusas con su característico miedo confundiendo a la coneja

Mirko- tranquilo no te voy a pegar- el pecoso abrió un ojo mirando asustado a la coneja- a menos claro que seas un villano- susurró esperando que el chico no la escuche

Izuku- en... Entiendo- no se relajó del todo y solo se quedó allí admirando a una de las mejores heroínas de la actualidad

Mirko- que haces aquí mocoso? - habló un tanto incómoda por como la veía, no era la clásica mirada pervertida hacia sus piernas o su cola esponjosa, el chico miraba con curiosidad y no con Perversión