Lo prometido no siempre es deuda [Sirius Black]

capítulo 24

la lechuza de los Black

- ¿Qué cojones es eso? — preguntó James saliendo de la cama alarmado y agarrando su varita para defenderse lo más rápido que pudo.

- Deja la varita donde estaba, James. Noche se asusta si ve alguna amenaza — dijo Sirius abriendo la ventana — es mi lechuza, seguramente la habrá mandado Regulus.

- Si y no creo que traiga buenas noticias — contestó James recogiendo la carta del suelo y dándosela a Sirius.

En el sobre se leía la palabra urgente y el nombre se Sirius. Este abrió la carta con un ligero temblor en las manos, deshaciéndose del sobre y cogiendo el papel del interior.

Sirius,
Padre acaba de saber de tu marcha y Madre ha entrado en cólera, ambos te están buscando por todos los lugares posibles en los que suponen que estas. No tardarán mucho en averiguar que estas en casa de los Potter y aunque no quieran tener relación con ellos por la supuesta traición a la sangre ten por seguro que van a ir en tu busca. Amenazan con matarte cuando llegues a Grimmauld Place.
Suerte Sirius, siempre que pueda te escribiré las noticias que te puedan servir de ayuda, igual con las que puedan ponerte en peligro tanto a ti como a los Potter.

Siempre tu hermano, R.A.B

- James... tengo que irme de aquí, estáis en peligro, mis padres os mataran... Valerie... La van a matar, mi rubia... — Sirius empezó a desvariar y a ponerse en lo peor. Todo muerte que acabaría con la suya propia.

- Ey, Sirius — lo llamó James posando las manos en sus hombros —. No te va a pasar nada, aquí estas a salvo, mis padres te defenderán, Valerie y yo también, eres uno más.

- No James, no lo entiendes, mis padres son capaces de todo sin importar a quien o que se lleven por delante, os mataran sin contemplaciones. Y no podría vivir con eso, ni morir tampoco, mis padres saben como hacer daño y me mataran a mi el último después de haber contemplado vuestra muerte, James yo no estoy preparado para eso. No quiero haceros daño. Me tengo que ir.

- ¿Y dónde vas a ir, Sirius? ¿Dónde estarás mejor que aquí? Si te vas con Remus pasará lo peor, todo el mundo se enterará de su condición y lo matarán a él y a sus padres, Lyall y Hope... Con todo lo que han luchado por Rems. O vete con Pete, que maten a sus padres, que se den cuenta de que Pete es medio bobo, como dice Minnie, y que lo utilicen para los peores fines. Vete con tu familia, cuéntales que te arrepientes y que les de igual matarte, entonces tu hermano si que estará solo ante el peligro de tus padres. O mejor todavía, vete a la puta calle sin seguridad y que te maten allí, sin siquiera perder defenderte. Sirius, somos tu mejor opción.

Sirius abrazó a su amigo muerto del miedo. Se aproximaba una guerra mágica gracias a Riddle, o Voldemort, como le gustaba que lo llamaran. Y ahora en busca y captura por sus propios padres.
El pelinegro se separó de James y se fue directo a su maleta, la cual puso encima de la cama y abrió buscando algo, revolviendo toda la ropa, sacándola y tirándola por los suelos, al igual que sus ahorros, sus joyas y todo lo que contenía la maleta, pero nada de lo que realmente buscaba.

- ¿Necesitas algo, Black? — preguntó James al verlo tan alterado.

- Mis bromas... Los materiales para las bromas, los avances que habíamos hecho... está todo en mi casa...

- ¿Para que coño quieres ahora las bromas, Sirius?

- Hay trampas, trampas peligrosas...

- Trampas que podemos poner...

- Para mantenernos a salvo — concluyó Sirius.

- Aquí tengo materiales pero, creo que no serán suficientes.