La Ceresiana Reencarnada

Capítulo 24

Boku no Hero Academia, pertenece a Kohei Horikoshi.

Dragon Ball, pertenece a Akira Toriyama.

NOTA: En este Fic, Fem-Izuku es la reencarnación de Müesli, la madre de Granolah (quien tendrá la transformación de su hijo). Y.... aquí, Izumi es una Futanari.

(Y lesbiana, como cada vez, que hacemos un Fem)

Izumi usó su Bukūjutsu, para poder volar, y así llegar más rápido, a la oficina de la heroína conejo Mirko, quien trabajaba desde un edificio de cinco pisos, y bastante modesto. —Todo lo contrario, a otras heroínas, mucho más ostentosas —pensó ella, sonriente, mientras ingresaba, y se acercaba a recepcionista.

La mujer de cabello negro, vestida como una oficinista, común y corriente, la relajó un poco. Al ver a la joven, solo un nombre, le cruzó por la cabeza, a la mujer. —Tu debes de ser Müesli-Chan, ¿Verdad?

—Lo soy —afirmó.

—Gracias señorita, espero volverla a ver, pronto —dijo Müesli. La adolescente presionó el botón quince del ascensor, y escuchó la para nada común, música Rock, del ascensor. Al llegar al piso deseado, encontró un gimnasio. —Curioso.

— ¡Bienvenida, Müesli-Chan! —dijo una voz, desde las alturas. La peliverde vio a una mujer, lanzarse desde un trampolín, caer al suelo, rodar sobre sí misma, y realizar algunas volteretas y piruetas, antes de quedar de pie, frente a ella. La heroína de cabello lacio y blanco, un par de orejas de conejo, salían de su cabeza, contaba con una constitución atlética, brazos y piernas musculosos, de piel bronceada, tenía ojos rojos. —Tu traje de heroína, debe de resultarte tan cómodo, que puedas hacer uso de él, en cualquier situación. —La heroína vestía con un maillot blanco sin mangas, con unos acabados en púrpura oscuro, alrededor de los hombros y la cintura. En su amplio pecho, llevaba una luna creciente amarilla, unos guantes blancos, con unas largas mangas violetas que llegaban a sus antebrazos, luciendo pequeñas protuberancias triangulares, alrededor de los bordes; además de dos gruesas placas de metal en la cintura. Llevaba unas botas moradas hasta el muslo, y más placas, que hacían parecer sus botas, como pies de conejo. Se aclaró la garganta, y alargó la mano, tomando delicadamente, la mano de la adolescente, girando suavemente, y acercándola a sus labios, depositando un beso. —Es un verdadero placer, conocerte finalmente en persona, Müesli. —Soltó la mano de la adolescente de verdes cabellos, mirándola de arriba abajo. —Eres joven, pero ya te has estado haciendo, de un nombre. —Asintió. —Me gusta mucho, cuando las personas, cuentan con ese tipo de... Llamemos a esto... "empoderamiento". Empoderamiento y personalidad propios. No dependes de nadie, y es así, como debe de ser, y como debes seguir. —Izumi asintió.

—Te agradezco mucho, por aceptarme para mis Pasantías —dijo Müesli.

Mirko le enseñó una sonrisa, y comenzó a caminar por delante de ella, haciendo un movimiento con la mano, para que la siguiera. Juntas, subieron por unas escaleras, hasta una puerta, que parecía sacada de algún barco, pues contaba con una manija de la puerta de un barco, teniendo la heroína que girarlo, para que la puerta se abriera. —Esta sala es especial. Cuenta con varios aditamentos especiales. Entre ellos... —caminó, hasta la consola, y colocó el temporizador en 24:00, y presionó algunos botones. — ¿Sientes que ahora, todo es más pesado?

—S... Sí... —afirmó Müesli. — ¿Qué es esto?

—Una sala de gravedad y de... Bueno: algo más, pero no me lo creerías —dijo Mirko, sonriente. —En cualquier momento, nos llamarán de afuera, pues estamos esperando la llamada del héroe Lady Nighteye, es quién está entrenando a Togata Midori.

— ¿Porqué esperamos su llamada? —preguntó Muësli.

—Tiene un caso complicado, desarticular a una poderosa red de narcotráfico, y quiere a lo mejor, de lo mejor —explicó Mirko. —Modo 001-44-B, activado. —Desde las paredes, salieron varias esferas. —Esquiva los rayos láser. No te causarán daño alguno, así que no te preocupes por eso.

Esquivaron rayos de luz, se impulsaron con trapecios y barandillas. Tenían que apagar las esferas de rayos de luz, con esa gravedad aumentada.

—No es fácil —pensó Muësli, agachándose. —Pero... Pero creo que... —rodó por el suelo, para esquivar dos rayos, ciertamente molestos. —Creo que me puedo acostumbrar rápido y... Estoy siendo más rápida.

Cuando finalizó el entrenamiento, fueron a comer algo, solo para que Muësli se quedara en blanco, cuando la secretaria le informó, cuan impresionante y de Ciencia Ficción, era aquella Cámara de Gravedad y Tiempo, pues trabajaba con un Agujero Negro en miniatura, que distorsionaba el espacio-tiempo dentro de la cámara, haciendo que en tres horas, entrenaran lo de tres semanas. Dos días después, Muësli y Mirko, fueron a reunirse con Lady Nighteye, y otras heroínas de gran estatus. Escucharon del caso que les prestaban: Una niña inocente, era utilizada por su padre, para crear drogas que destruían Kōseis desde dentro, hacía afuera.